Una planta de procesamiento de residuos de Holanda procesará anualmente unas 150.00 toneladas de pañales para convertirlos en en gas verde, fertilizantes, biomasa y plásticos.
Foto de letsfamily.es
Seguro que al leer el titular has pensado: “¿Energía renovable y muebles con pañales reciclados? Imposible”. Pero te equivocas, es posible y esta iniciativa la está llevando a cabo la firma holandesa ARN.
Los bebés recién nacidos utilizan 8 o 10 pañales al día, cantidad que se reduce a medida que van creciendo, situándose el gasto en 4 o 5 a partir de los 4 meses. Esto se traduce a que si hacemos la media, en los tres primeros años de vida, un niño utiliza más de 6.700 pañales. Cada pañal sucio pesa unos 150 gramos, ¿te has dado cuenta ya de la cantidad de residuos que esto significa? La mayoría de los padres no saben dónde acaban los pañales que tiran y que tardan entre 300 y 500 años en degradarse.
Ahora, esto puede dejar de ser un problema gracias a la instalación especial que se está construyendo en Nijmegen, una región situada cerca de frontera con Alemania. Esta planta de reciclaje convertirá a los pañales en gas verde, fertilizantes, biomasa y plásticos. ¿Cómo?, te estarás preguntando. Muy fácil, gracias a un reactor que puede alcanzar temperaturas en alta presión de hasta 250 grados. Los pañales, con sus respectivos contenidos incluidos, se volverán líquidos y se separarán en diferentes materiales. Además, gracias a la alta temperatura del reactor, las bacterias, virus y restos de medicamentos se eliminarán.
El objetivo es que la planta de reciclaje se inaugure en diciembre de este año y que procese anualmente, unas 150.00 toneladas. Si tiene éxito, la idea es que se construyan más instalaciones en un futuro cercano.
Mientras esperamos a que la planta se abra, podemos contribuir a no contaminar el planeta utilizando pañales de tela o desechables ecológicos que tardan, solo, entre 3 o 6 años en degradarse.
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