El diseñador pionero en el uso del reciclaje en la moda considera ahora vender su firma homónima para que perduren esos valores éticos, sostenibles y reivindicativos que siempre ha caracterizado su trabajo.
Miguel Adrover por Germán Sáiz
Aunque lleva años alejado de las pasarelas, Miguel Adrover aún encarna principios como la producción orgánica y la conciencia social. El diseñador mallorquín, que echó el cierre por problemas económicos, estudia ahora vender su marca por estar vinculada a las prácticas sostenibles tan en boga actualmente en el mundo de la moda.
El creativo es uno de los mejores diseñadores que ha dado este país. A pesar de no haber estudiado, este autodidacta se convirtió en el rey del reciclaje creando prendas a partir de otras ya existentes. Dejó los estudios a edad temprana y ayudó en la granja familiar. Posteriormente se mudó a Estados Unidos donde comenzó su particular sueño americano, fregando suelos y limpiando cristales al tiempo que confeccionaba en casa. Pasó a la historia por metamorfosear un trench Burberry en vestido, o un bolso Louis Vuitton en falda. Hito en la moda desde finales de los 90 y primera década de los 2000, vio su carrera truncada con su quinta colección, ‘Utopía’. Con ella pretendía ensalzar la diversidad cultural árabe, pero el destino quiso que dos días después del desfile se sucedieran los atentados del 11-S y que se vinculara a Adrover directamente con el terrorismo; hecho que supuso una retirada de sus inversores.
Vaquera x American Apparel Fall 18 ready-to-wear
Ahora Miguel vuelve a la actualidad con esta posible venta. El detonante parece ser la camiseta con su rostro que presentó Vaquera x American Apparel durante su último desfile en Nueva York. Un símbolo evidente de que el diseñador sigue siendo un referente ineludible en la esfera de la moda: “Esta gente le ha puesto mi cara a un top y todavía estoy vivo y aquí”, comentaba a WWD. Quizás, con el traspaso de su nombre ayude a que otros continúen con esa doctrina de conciencia medioambiental y producción sostenible, que como él mismo comenta: “debe estar ahí, ser llevada a la práctica”, dice a WWD.
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