Te descubrimos Yoguitos, un proyecto itinerante que acerca a los más pequeños los beneficios psíquicos y mentales del yoga.
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El objetivo principal de Yoguitos es encontrar la diversión a través de esta práctica milenaria, dotando al niño de herramientas necesarias para la posterior aplicación de lo aprendido a la vida en general. Los objetivos, por tanto, son muy orgánicos, y están enfocados a resaltar la naturaleza, la espontaneidad, la sinceridad y la autenticidad. Buscan que los niños sean felices con sus cuerpos y que conozcan el mundo que les rodea, aprendiendo también a cuidarlo.
Dichos objetivos se consiguen con clases alegres en las que el factor juego tiene una presencia notable, en las ue se aprende a dar y recibir energía, amor y paciencia, formando así una pequeña comunidad. María y Ju, sus creadoras, son dos profesoras que con Yoguitos tienen la suerte de poder unir sus dos grandes pasiones: el yoga y el trabajo con niños. “Trabajamos con juegos todo el tiempo, echamos a volar nuestra imaginación y espontaneidad, casi todo es improvisado, ya que el niño tiene esa naturaleza movida, que le permite solo pensar y vivir el momento”, describen con mimo en su página web.
El yoga – en sánscrito unión – es una de las mejores prácticas de cuidado integral que existen. Cuerpo, mente y espíritu se fortalecen a través de la relajación, la concentración y la meditación. Aquí, además, el pequeño tiene un rol autónomo, independiente y consciente, se divierte tal cual es y desarrolla fuerza y flexibilidad tanto en la mente como en el corazón.
Los papás, mamás, abuelos o amigos que acompañen a los pequeños yoguis también se beneficiarán de esta práctica. Cuentan con un equipo de profesionales que tanto en Barcelona, Sitges o Madrid cada día acompañan a más familias, siendo quizás eso cierto de que el bienestar se contagia.
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