Me levanto por la mañana y me termino de peinar en el taxi. Corro a la sesión de fotos. Decido con Anna los looks finales. Me tomo el té a las 12am. Vuelvo a la oficina y mando mil mails. Corro de vuelta a casa a cambiarme. Se me rompe un tacón. Juego un rato con los gatos. Vienen a buscarme. Voy al desfile. Me siento en front-row. Hablo con Anna sobre la fiesta de después. Nos cambiamos en el taxi. Me pinto los labios de rojo. Entramos al club. Nos dirigimos al photocall. Sonrío y poso. Me tomo un Manhattan. Me retoco en el baño. Me despido. Vuelvo a casa. Caigo redonda en la cama.
Me río muy fuerte. Estoy contenta. Soy feliz. Soy Grace.
Blusa de ÁLVARO MARS
Cuerpo AVELLANEDA, jersey cuello alto y pantalón SITA MURT y pendientes de LINE ARGENT
Vestido BAAL BOMBER, camiseta COS y medias HYD
Traje de AVELLANEDA y pendientes KALEA
Chaqueta de ALESSANDRO ENRIQUEZ y broche RYUNGJAE JUNG
Camisa LORENZO MARTINEZ, falda SITA MURT y zapatos MILA MILU
Unas botas negras y amarillas de MIU MIU nos conducen en este editorial de Valeria Mitelman y estilismo de Venessa Arnold con la modelo Ajsa de Girls Club Management en exclusiva para #VEINDIGITAL
Patricia Bonet nos presenta su homenaje al mar. Una serie de fotos inspirada por el movimiento del agua, el choque de la arena anaranjada con el profundo azul del mar. Las texturas de las redes, el aire, la forma de las olas. El estilismo lo firma Isis Rodríguez y el maquillaje y peluquería Mariona Botella.
En 2012 todos los ojos se pusieron sobre ella en el vídeo “Genesis” de Grimes. Con sus largas trenzas rosas, a medio camino entre Barbarella, la robot de la icónica película Metropolis y una heroína futurista nipona, Brooke Candy se ganaba un espacio propio con sus hipnóticos bailes y una imagen de impacto al servicio de una personalidad imposible de encasillar.de una personalidad imposible de encasillar.
Rapera, modelo, fotógrafa, estilista y stripper, hija de Tom Candy, co-fundador de la revista pornográfica Hustler, la misma que dio fama a Larry Flint, Brooke utiliza la moda, la música, el sexo y su cuerpo como armas arrojadizas para dinamitar cualquier tipo de normativa.
Tras el lanzamiento de su primer álbum, Sexorcism, Brooke no se limita a la música y reivindica por encima de todo su libertad vital y creativa entonando un único mantra para un futuro mejor: AMOR INCONDICIONAL.
El número lo cierra una conversación entre Alice Waddington y Nerea Pérez de las Heras, justo después de estrenar su debut "Paradise Hills" en Sundance