#NEPOBABY: sobre el privilegio de ser hijx de

13 / 12 / 2022
POR María Quiles

Un tema polémico que salpica a descendientes de personas famosas. El término Nepo Baby nombra una realidad de derechos privados a los que pocos tienen acceso. Las hermanas Hadid, Lily-Rose Depp o Zoë Kravitz son algunas de ellas. En #VEINDIGITAL reflexionamos sobre este tema.

El apellido y la sangre han importado desde siempre y han sido un motivo de peso para el reconocimiento de una persona y su papel en la sociedad. La propia realeza es prueba de ello. Sin embargo, la fama de celebridades en nuestra sociedad está ahora en el punto de mira. Nepotismo es el término que pone nombre a esta presente polémica en las redes: el trato de favor hacia familiares o amigos, que consiguen puestos de trabajo o cargos importantes simplemente por tener esa relación.

Ser “hija o hijo de”, si va de la mano de un apellido reconocido, suele ser sinónimo de ventajas. Y no hace falta ir al mundo de lxs celebrities y el reconocimiento de sus hijos para verlo claro. Ser familia de abogados o médicos con cierto renombre también te da mayor validez en sus respectivos sector, y así con cualquier profesión. ¿Dónde queda, entonces, la idea de meritocracia tan propulsada también en redes sociales últimamente? Esa idea de luchar y esforzarse para conseguir objetivos queda totalmente a parte cuando  el nepotismo está tan presente y visible en la cultura popular que consumimos.

El clan de las Kardashian y las Jenner, las hermanas Hadid o Lily-Rose Depp y Kaia Gerber son algunos de los ejemplos más recientes y criticados de lo que conocemos como nepo baby. Sin duda, el caché de sus padres les ha abierto un amplio abanico de posibilidades. En generaciones anteriores, este hecho se ignoraba y se daba por sentado, nadie se preocupaba realmente por la influencia del nepotismo. Ahora, en cambio, se acepta, pero se critica. Sobre todo, cuando se desprestigian los méritos y el trabajo de otras personas del sector en cuestión. El concepto de nepo baby ha surgido a raíz de estas críticas y se utiliza para desprestigiar a generaciones de talentos que resultan ser hijos de famosos.

Ahora es habitual mirar con recelo o hasta con desprecio a quienes tienen padres con apellidos relevantes. Nos fijamos en cómo ha llegado Kendall Jenner a la cima de las modelos sin apenas asistir a castings o en cómo el apellido de Zoë Kravitz la ha llevado a obtener papeles en ‘Big Little Lies’ o ‘Catwoman’. Sin ir muy lejos, ¿cómo Lily-Rose Depp no iba a acabar siendo famosa al ser hija de Vanessa Paradis y Johnny Depp?

El foco de la cuestión realmente está en que quienes poseen ciertos apellidos lo han tenido más fácil a la hora de llegar a ser reconocidos. El trabajo y esfuerzo que hay detrás del trabajo de estas modelos o actrices es incuestionable, pero hay que aceptar el plus y el privilegio que supone poseer un apellido, sin desprestigiar el talento que tengan. Claro está que una modelo que empieza en la industria de cero no tiene los privilegios ni el mismo recorrido que ha tenido Kendall Jenner para llegar donde está.