En su tercera colección para Margiela, Galliano se ha unido a a la marea tributos que el mundo de las artes rinde estos días a David Bowie. Para ello ha contado con Pat McGrath, la «maestra del pincel», como encargada deel arte facial. Aladdin Sane y Ziggy Stardust se dejaron sentir en pelucas de colores y maquillajes estelares. Los cristales y perlas se combinaban con brillantina, constelaciones plateadas y labios surrealistas.
En cuanto a la colección, la teatralidad se adueñó de todas las prendas. El glam-rock se manifestó a través de las estrellas y collages abstractos que decoraban las botas de caña alta.
Las combinaciones de siluetas y tejidos eran casi arbitrarias: satén con flecos, plumas y grandes hombreras, brillantes y descosidos o gasas con cuadros
