Dice una famosa cita de Albert Einstein que nada sucede hasta que algo se mueve. La tatuadora y surfer Hellens Saigi, 21 años y nacida en Badalona, un pueblo pescador al lado de Barcelona, ha crecido corriendo: “Desde pequeña soy muy movida, estaba todo el día haciendo volteretas. Me decían que parara pero yo no podía”. Hoy el movimiento y la velocidad siguen siendo el argumento principal de su vida, ya sea persiguiendo una ola encima de una tabla de surf, corriendo en la playa, a lomos de su skate o deslizando con habilidad el lápiz en su tableta digital mientras boceta un nuevo tatuaje.
Con ella descubrimos las bondades del nuevo Motion Adapt Bra de Nike, un sujetador deportivo muy versátil que se ajusta al cuerpo como un guante y que está especialmente diseñador para saltar de una actividad deportiva a otra. Aunque aparentemente podría parecer un sujetador cualquiera, en su interior esconde un nuevo material que se va ajustando en función de si hacemos actividades de más o menos intensidad: “Su material suave y único se adapta a tu silueta y es muy flexible, moviéndose contigo mientras realizas actividades de bajo impacto”, explica Nicole Redone, directora de diseño de Nike Bras and Innovation. En definitiva: un solo sujetador que sirve para cualquier tipo de ejercicio.
Hellens escogió este sujetador que se ha ganado el título del “más cómodo” en color rojo y lo lució mientras dibujaba, surfeaba con su skate y hacía una pequeña rutina delante del mar. Amante de la velocidad, Saigi adora los deportes extremos y cualquier actividad que entrañe retos: “Me hacen sentir cosas muy fuertes. Además me encanta superarme. Ojalá pudiera hacer surf cada día”. Comenta mientras recuerda con nostalgia sus jornadas de surf en Bali, y es que aunque vive a cinco minutos de la playa, las olas del mar Mediterráneo no aseguran tanta diversión: “Aquí en Barcelona las olas duran nada. Allí eran eternas. Era como estar en otro planeta, flotando. Una sensación de libertad inexplicable. Todo desaparece y estás tú y la ola”.
Saigi ha sido una gran amante de los deportes extremos desde bien pequeña. “Soy nerviosa. Quiero saber hacerlo todo. Veo algo que me gusta y ya directamente lo quiero hacer, quiero aprender…siempre quiero más, más y más”. Atrevida, impaciente y tenaz le gusta atreverse allí donde no lo hacen otras: “Me gusta ser una de esas chicas que se atreven con el deporte extremo. La gente se sorprende cuando haces algo que no es habitual que haga una chica. Cuando vas con el skate o das un salto en snow, exclaman ¿Quién es esa pava?. Me siento un poco chico en este sentido. En la playa ves a una chica surfeando y sesenta chicos”. Aunque reconoce que ahora se empiezan a ver más chicas critica también que hay mucho hype: “No estoy segura de si lo sienten de verdad o es la moda. Ves mucha gente con el skate en la mano y las ruedas nuevas. A mi me gustaría que las chicas que lo hagan lo hagan con sentimiento no por postureo”.
A ella la emoción del riesgo le hace sentir viva. Sentimiento que comparte con su pasión por el dibujo, hoy su profesión desde que entró en el mundo de los tatuajes: “Dibujo desde pequeña. Nunca me lo había tomado en serio, pero a través de las redes sociales empecé a recibir mis primeros encargos”. Hoy se dedica profesionalmente a ello, algo que la ha alejado del skate, ya que tiene que cuidar sus manos. Desde pequeña había sentido atracción por los cuerpos tatuados: “Hay gente que le tiene miedo al tatuaje, pero cuando lo tienes pasa a formar parte de ti. Es un “daño-gusto”. No es como dibujar en papel, hacerlo en la piel lo convierte en algo muy especial. Me hace mucha ilusión cruzarme en la calle con gente que lleva mis tatuajes.”
El deporte y el dibujo le permiten sentir libertad y desconectar a través de una pasión: “Me producen un sentimiento parecido, el de desconectar para concentrarme en la acción, y la voluntad de superarme día a día”. Feliz de poner en práctica el Carpe Diem: “Si dejas de hacer cosas, te las pierdes. Soy de disfrutar el momento y no tener que pensar en lo que haré mañana”, Saigi deja caer que le gustaría convertirse en actriz. De momento ha podido con todo lo que se le ha puesto por delante: “Me gusta lo difícil, lo que piensas que no podrás hacer. Si te pones límites no avanzas”. Estaremos atentos.
