Gina Wynbrandt: “Entiendo que el feminismo tenga que ser serio, pero es más efectivo el entretenimiento”

07 / 04 / 2017
POR María Yuste

Cuando uno se encuentra un cómic como Que alguien se acueste conmigo, por favor de Gina Wynbrandt en el catálogo de un gran grupo editorial no sabe si preguntarse qué hace una chica como ella en un sitio como ese o celebrar el primer atisbo del indie de hoy convirtiéndose en el mainstream de mañana. Y eso es maravilloso porque en una industria dominada por una mirada tradicionalmente masculina, hacen falta más como la suya. Porque Gina, con una honestidad brutal, ha demostrado que lo que lleva a una veinteañera a enamorarse de Justin Bieber como una quinceañera puede ser desternillante, pero, en ningún caso, tonto.


 

Leyendo las primeras críticas de Que alguien se acueste conmigo, por favor en España parece que a algunos lectores les ha incomodado tu sinceridad. ¿Te ha sorprendido? Es decir, ¿no se supone que un libro debe ser honesto?

Supongo que me ha sorprendido un poco porque vengo del mundo del fanzine, en el que se habla de todo y se publica de todo, así que no siento que yo haya sido muy subversiva ni que lo que cuento sea para tanto.

¿Crees que puede haber influido el hecho de ser una mujer que habla de su sexualidad desde un punto de vista que no es el aceptado socialmente? Me refiero a que te has cargado el cliché de que es el hombre quien va desesperado detrás de una mujer para acostarse con ella y no al revés.

Tal vez puede que tenga algo que ver con lo que dices, pero no lo sé porque en Estados Unidos, al menos, es diferente. La escena del cómic indie está protagonizada ahora mismo por mujeres.  Por ejemplo, el año que yo estuve nominada al premio Ignatz, el más importante en el mundo del cómic independiente, todas las ganadoras fueron mujeres. Diría que incluso, en estos momentos, ser mujer podría ser hasta una ventaja.

Pues aquí, en el Salón Internacional del Cómic de Barcelona, ha habido polémica este año porque, de entre 35 nominados, solo 3 eran mujeres…

Desde luego, la escena mainstream aún está dominada por hombres. De hecho, a mí, aunque en España me ha publicado una gran editorial, en EEUU lo hace una pequeña.

Tengo que confesarte que leyendo el libro tuve miedo de que pudiera malinterpretarse como antifeminista.

Entiendo que pudiera ocurrir porque todo el cómic va de mi queriendo atención masculina. Es por eso que he intentado reírme de mi misma. Con esa idea que te transmiten de que una mujer sola es lo más patético del mundo, siento que he sido educada para buscar la atención de los hombres y he querido atacar esa necesidad a través del humor.

Al final, has retratado los efectos que la cultura pop tiene en muchísimas mujeres y mostrar esa realidad sin miedo a no ser reconocida públicamente como una mujer fuerte e independiente es empoderador.

Creo que tiene que haber espacio para todo tipo de interpretaciones de la mujer dentro del feminismo. Mi libro no es una gran obra política, pero soy una autora con ideas propias sobre la política y la sociedad aunque, para mí, lo más importante sea entretener a la gente. Yo entiendo que el feminismo tenga que ser serio porque el mundo está jodido, pero también soy de la opinión de que es más efectivo cambiar la forma de pensar de la gente a través del entretenimiento. Nadie te presta atención sino.

 

Para mí, una de las escenas más representativas de todo lo que sucede  en el cómic es esa viñeta en la que te sientas en la cama supercabreada y le gritas a la carátula de American Pie: “¡¡¡Me habeis mentido!!!”.

Sí, creo que me siento tan sola y triste porque mis expectativas con respecto a la vida real están basadas en productos como American Pie y similares, así que creciendo creía que se me debía todo el sexo maravilloso que las comedias de instituo me prometían y que nunca tuvo lugar.  Eso me enfadaba. Así que creo que esa es la razón por la que hablo tanto de cultura pop en mi obra.

Sin embargo, he leído que tenías miedo de que te tomaran por tonta al hablar de tu crush con Justin Bieber. Si algo muestra claramente Que alguien se acueste conmigo, por favor es cómo el entretenimiento y la cultura pop no tienen nada de insustancial o de tonto como muchos piensan.

Cuando era adolescente, había estrellas pop que me gustaban, pero nunca llegué a obsesionarme porque yo misma pensaba que solo la gente tonta caía en esas cosas y que a mí me gustaba leer y era inteligente. Pero lo cierto es que son propaganda y Justin Bieber es un producto con grupos focales y millones de dólares en marketing detrás. Yo ya estaba en mis 20 cuando apareció aquel chico canadiense tan guapo que me cantaba canciones solo a mí. Me sentía muy sola y decidí aceptar esa ilusión de falsa intimidad con él. No sé, el objetivo del capitalismo es aislarnos a todos para poder vendernos cosas y creo que la carrera de Justin Bieber ejemplifica muy bien todo eso.

Y, por fin, ¿pedirlo educadamente con el libro te ha ayudado a ligar más?

Bueno, algunos chicos se han interesado y, vale, estoy desesperada, pero no tanto… Recuerdo que en un festival se me acercó un hombre bastante mayor a decirme que no entendía por qué no ligaba si soy más atractiva que las escorts de talla grande de los anuncios clasificados… Después me dejó caer que tendría que consultarle a su mujer, pero que seguramente le dejaría follarme. Aunque también he tenido un par de buenas experiencias con groupies en Europa. La verdad es que pensaba que iba a tener una cola enorme de interesados pero, una vez más, no ha sido así.