El diseño no está reñido con cuidar el planeta y estas 8 firmas que producen localmente atractivas propuestas, son una muestra de ello.
Camila
Desde el siglo XIX, los bañadores comenzaron a convertirse en la segunda piel de mujeres que empezaban a disfrutar de la época estival, en playas y piscinas. Poco o nada se sabía entonces de la producción sostenible y grande ha sido su evolución a lo largo de la historia, en cuanto a formas, estilo y confección. También ha cambiado la manera de llevarlo, ya que muchas de las propuestas actuales se inclinan por prendas versátiles, que sirvan a la vez para hacer deporte o que se puedan combinar con nuestra ropa en el día a día. Pero, sin duda, el cambio más importante lo experimentamos en el ‘cómo’ y el ‘con qué’, gracias a un creciente número de marcas que apuestan por hacer sus prendas sin dañar el medioambiente, en condiciones de trabajo dignas y con materiales sostenibles de alta calidad. He aquí nuestras propuestas de firmas conscientes:
· ILOVEBELOVE ·
«Nuestros bañadores se confeccionan íntegramente en un taller almeriense con tejidos de origen italiano ecológicos y elaborados a partir de fibra reciclada, proveniente de las redes de pesca abandonadas. El proceso de diseño y patronaje lo hacemos desde nuestro estudio, ubicado en Adra, un pequeño pueblo almeriense a orillas del Mediterráneo» – apuntan Carmen Castro y Eduardo Santillana, los fundadores de Ilovebelove. Ellos se inspiran en los colores, la luz, o la arquitectura para crear a estas bellezas mediterráneas, y aseguran que no creen en las tendencias, apostando así por prendas duraderas y atemporales que sean cómodas y respetuosas con el medio ambiente.
· All Sisters ·
«Nuestra filosofía es crear trajes de baño cómodos y modernos, que respeten el cuerpo femenino tanto como el medio ambiente y sus recursos naturales: prendas elegantes y atemporales que generen confianza» – nos comenta Alba , una de las creadoras de la firma. All Sisters produce sus bañadores en un taller de Barcelona, ya que su «idea de marca también es propulsar la producción local y de proximidad». Sus bañadores se inspiran en la cultura surfera, que le da ese toque deportivo tan característico de la marca, y están confeccionados de forma sostenible: Utilizamos tejidos reciclados de alta calidad, fabricados en Italia, que llevan la certificación Made in Green by OEKO-TEX®, una acreditación que garantiza la ausencia de sustancias nocivas y que están fabricados en instalaciones respetuosas con el medio ambiente, en un entorno de trabajo socialmente responsable – nos dice.
·Reset Priority·
Ester Milano, directora creativa de la marca: Diseñamos, prototipamos y desarrollamos todas nuestras piezas en nuestro estudio en Barcelona y producimos todo en España, revisando el proceso de producción de principio hasta final. Elegante y con carácter, Reset Priority crea prendas que gozan de exclusividad y que son contemporáneas, siempre con el propósito de potenciar la confianza de la mujer, y que además están producidas de manera responsable: Utilizamos para nuestros bañadores materiales reciclados a partir de botellas de plástico y redes de pesca, retrabajados para crear tejido nuevo. Los materiales son de Italia y certificados por el reciclado desde Econyl, y también por su durabilidad de parte de Xtra Life Lycra (su elasticidad dura hasta 10 veces más de tejidos no tratados) – comenta.
· Bohodot ·
Sus creadoras, la diseñadora de moda Peque de Fortuny y su hija, Cristina Torras, emprendieron este proyecto en 2012, apostando por el cien por cien made in Spain. «Su filosofía de producción se basa en trabajar solamente con proveedores locales. Todos sus tejidos provienen de proveedores españoles (nunca compran tejidos fuera) e incluso “ los rellenos”, las fornituras etc.. todo proviene de aquí.” nos explica Cristina . Los bañadores Bohodot están destinados a ser sumergidos en los mares por chicas jóvenes de carácter bohemio, soñadoras amantes de la libertad y los atardeceres eternos. Prendas que se caracterizan también por la sensualidad, la calidad y el estilo, con delicados bordados, algunas, y pequeños acabados, otras, realizados con mucho mimo, que además «se
confeccionan en pequeños talleres de la costa de Barcelona, conservando así la gran tradición textil de esta zona.» – apunta.
· Pale ·
«Nuestra ropa se produce en talleres situados en Barcelona, lo que nos permite controlar los procesos y mantener una relación directa con las personas que intervienen en el proceso productivo de nuestras prendas» – transmite Marta , una de sus creadoras. Bañadores y bikinis de cintura alta, tanto lisos como estampados, se producen con materiales que provienen de la Unión Europea. «Además nuestro principal proveedor de tejidos trabaja para reducir cada año las emisiones de dióxido de carbono y controlar el impacto medioambiental en sus procesos a través de un desarrollo sostenible de sus actividades, además de comprometerse a que sus productos no contengan substancias peligrosas para la salud como pesticidas o metales pesados.» Las prendas Pale tienen una identidad propia, combinando elementos de la ropa de baño y otros más propios de la lencería, todo ello bajo líneas limpias, a las que dan vida posteriormente con colores cuidadosamente elegidos.
·Baelle·
Bajo este sonoro nombre, unión de Bárbara, diseñadora de la marca, y pour elle, se confeccionan prendas de baño fusionadas en armonía con la lencería, logrando así el equilibrio perfecto entre elegancia, belleza y seducción. «Fabricamos 100% en España en talleres que en su día tenían grandes producciones y que por culpa de la crisis se han vuelto pequeños. En la lencería usamos principalmente Bambú y algodón orgánico que lo mezclamos con tull y distintos encaje. En cuanto al baño, gran parte de la colección está fabricada con poliamida reciclada.» – cuenta Bárbara. Sus productos están reconocidos internacionalmente con la certificación Sensitive Fabrics, que asegura que han sido producidos respetando los índices de sostenibilidad. En Baelle son también amantes del contraste, y por eso presentan siempre tres colecciones, cada una de ellas representante de un estado de ánimo concreto en cualquier día de una mujer.
·Cabuya·
Bajo el objetivo de poder conciliar la vida familiar con la profesional, Cristina Cañamares fundó Cabuya en Madrid, inspirada en la paradisiaca playa costarricense que le da nombre a la marca. «Nuestras prendas se producen en Portugal y España. El material principal que utilizamos es ECONYL, una poliamida de extraordinaria calidad 100% reciclada a partir de residuos plásticos recogidos, también del mar, como redes de pesca, que son procesados y transformados en un nuevo tejido.» – comenta. Sus bañadores están enfocados a una mujer normal, pero no por ello corriente, a la que le gusta estar activa y hacer deporte, sintiéndose guapa a la vez que disfruta de los días de sol y playa. Una mujer que tiene conciencia medioambiental y elige, por tanto, prendas hechas de manera sostenible y de buena calidad; que duren.
·Camila·
Su diseñadora, Camila Carles-Tolrá Galofré, nos explica: «Producimos en Barcelona, tenemos un taller en la calle modolell 72 donde se desarrolla diseño y corte de las prendas y donde también abrimos al público para enseñar la colección. Los materiales y producción de los mismos tiene origen en Barcelona y afueras (mayoritariamente en Maresme). Buscamos telas de alta calidad y los materiales son variados.» Camila se inclina por una mujer sensible a los detalles, muy femenina y amante de la estética y la exclusividad. Sus swimsuits se caracterizan por ser atemporales, y son sinónimo de armonía y belleza; siempre con el color como protagonista y rasgo distintivo de su personalidad.
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