Maria Grazia Chiuri estuvo hasta ayer mismo en Valentino junto a su inseparable Pierpaolo Piccioli y hoy, la noticia recorre el mundo entero, la diseñadora italiana se convierte en la primera mujer al frente de Dior en sus 70 años de historia, sustituyendo al tándem de Lucie Meier y Serge Ruffieux, que fueron los responsables transitorios después de la despedida de Raf Simons en octubre de 2015.
Chiuri conoció a Pierpaolo a principio de los 80, cuando estudiaban en el Istituto Europeo di Design de Roma. Ahora, Pierpaolo continuará en solitario al frente de Valentino. El fichaje de Chiuri supone la consagración definitiva de un personaje discreto, aunque bien conocido en los círculos de la moda romana, donde lleva tres décadas ejerciendo. Tiene 53 años, está casada y tiene dos hijos y en su curriculum, puede presumir de conseguir hacer resurgir la marca fundada por Valentino Garavani a finales de los años cincuenta. El mítico diseñador la fichó personalmente en 1999 junto a Piccioli cuando ambos trabajaban para otra legendaria marca romana: Fendi, donde revitalizaron los accesorios y participaron en el diseño de un superventas como el bolso baguette.
Chiuri es una apasionada por la historia del arte, en la que empapa todos y cada uno de sus diseños. Esto bien lo saben algunas de sus fans, como Cate Blanchett, Anne Hathaway, Jennifer Aniston, Nicole Kidman o Keira Knightley, que lucen constantemente sus vestidos en las alfombras rojas. Además, se confiesa una adicta al WhatsApp y ha sabido sacar partido a las redes sociales, incluso metiendo a Ben Stiller en uno de sus desfiles para grabar escenas de Zoolander 2. “Internet e Instagram han cambiado nuestra vida y han cambiado la moda, porque ahora todo va muy rápido. Pero, a la vez, queremos mantener nuestra sensibilidad, nuestra artesanía, nuestra cultura. Eso es lo que marca la diferencia”, explicó a Harper’s Bazaar. Los resultados económicos son contundentes: Valentino rozó los 1.000 millones de euros en 2015, dos años antes de lo que preveía su plan empresarial.
Ahora toma el testigo de una de las casas históricas (hoy propiedad del imperio del lujo LVMH) de la moda que en el pasado ha estado en manos de los diseñadores Christian Dior (1946-1957), Yves Saint Laurent (1957-1958), Marc Bohan (1958-1989), Gianfranco Ferré (1989-1997), John Galliano (1997-2011) y Raf Simons (2011-2015). Habrá que esperar hasta el próximo 30 de septiembre para ver su primera colección de prêt-à-porter.
¿Volverán las mujeres a dominar las grandes marcas, como en los tiempos de Coco Chanel y Elsa Schiaparelli?
