PARANOID o la necesidad de detenerse, pensar y crear

20 / 11 / 2018
POR Mirena Ossorno

La diseñadora María Ramírez presenta su última colección cápsula de pañuelos

 

Para María (Albacete, 1990) el proceso de creación de Paranoid ha sido toda una experiencia de búsqueda y reencuentro con sus orígenes más artesanales y con una manera de trabajar más calmada y reflexiva. Tras un cambio de dirección profesional y vital, la joven diseñadora se inspira en una de las canciones más emblemáticas de la banda inglesa Black Sabbath para presentar una de sus colecciones más personales hasta la fecha.

 

 

La colección -de edición limitada- está compuesta por diez pañuelos de seda natural pintados a mano por la propia diseñadora. Cada una de las piezas ha sido creada con un patrón en blanco y negro diferente y con ese estilo minimalista y orgánico tan característico de la marca. Hablamos con María sobre la celeridad de nuestra época y sobre el presente de su marca.

Al igual que en Broken, la nueva colección ha estado inspirada por un momento personal algo difícil, como de ruptura y cambio. Cuéntanos un poco más sobre el proceso de creación de Paranoid.

Mi manera de comenzar con un proyecto viene dada casi siempre por alguna experiencia personal. Cuando me he enfrentado a procesos de cambios importantes en mi vida he querido transformarlos en parte de mi propio desarrollo como diseñadora o firma textil.

En el caso de Paranoid fue algo parecido. A principios de año compaginaba mi firma personal, proyectos como freelance y un trabajo en una compañía textil. Todo ese ritmo de vida frenético desencadenó en una neumonía con la que estuve hospitalizada varias semanas. Durante ese tiempo en el hospital me dio tiempo a reflexionar sobre la celeridad de mí día a día y decidí hacer un cambio. Dejé mi segundo trabajo y aposté por centrarme en mí y en mi marca.

Para esta nueva colección has intervenido en todos los pasos del proceso de producción, desde la confección y estampación a la realización de las fotografías de la campaña ¿Qué ventajas e inconvenientes le ves a hacerlo todo tú misma?

Casi todo son ventajas, ya que yo misma he podido controlar cada una de las fases de la producción de la campaña. Me encuentro muy cómoda realizando las fotografías y experimentando con las modelos, el espacio y los diferentes planos. Al tratarse de pañuelos, hay mucha libertad de presentación, de forma de vestirlos y combinarlos con otras prendas, lo que hace que el proceso fotográfico sea muy divertido. Además, en esta ocasión he trabajado con un equipo de buenos amigos, lo que ha hecho que el trabajo fuese mucho más natural y fácil.

Siempre he sido una amante de la fotografía y he hecho foto analógica desde muy joven. Me metí en Bellas Artes con la idea de especializarme en imagen aunque nunca me he dedicado profesionalmente a ello. Para mí es una afición que me interesa mucho.

 

 

En las fotografías de la campaña encontramos referencias al imaginario de Black Sabbath, de cuya canción (Paranoid, 1970) has tomado el nombre para tu colección. La sociedad cada vez nos arrastra con más fuerza hacia un estilo de vida frenético y paranoico ¿Cómo consigues tú encontrar cierta paz mental entre tanta locura?

Black Sabbath estuvo muy presente en esos meses de ritmo frenético y tenía que estar presente de algún modo en la colección. Me gusta crear historias y me gusta meter referencias de lo que me rodea en mi trabajo. Si no es en el estampado es en la imagen de la campaña. Siempre hay algún guiño.

Viviendo en el centro de Madrid nunca consigues llegar 100% a una paz mental. Toda la gente, comunicación, estímulos… es difícil, pero si hay algo que me de cierta paz es la gente que me rodea o trabajo personal.

En contraposición a ese ritmo frenético del que hablábamos en la anterior pregunta, la tendencia “slow fashion” cada vez cobra más fuerza (por suerte) y la red se está llenando de propuestas muy interesantes de diseño sostenible como la tuya ¿Cómo ves tú el panorama en este sentido?

Me alegra mucho que cada vez haya más propuestas de diseñadores y artesanos que quieran trabajar en ediciones limitadas. Que cuiden lo que son y lo que quieren trasmitir. El mercado de la moda necesita de acciones y productos sostenibles para afrontar el futuro.

¿Crees que el público español sabe apreciar este tipo de propuestas?

Creo que cada vez hay más público que sabe apreciar este tipo de propuestas, sobre todo las nuevas generaciones, que son más conscientes de ello y se están educando e interesando por crear marcas pequeñas y proyectos más personales.

Pero no es el mismo porcentaje que el público extranjero. Creo que vamos más lentos en cuanto a saber apreciar este tipo de trabajo, pero que vamos avanzando poco a poco.

 

 

Además de tu marca y los talleres que impartes, recientemente trabajaste en la dirección de arte de “La Habitación”, uno de los últimos videos de Niña Pastori ¿Cómo surgió esta colaboración?

La dirección de arte ha estado muy presente en todo mi trabajo. El proyecto de “La Habitación” surgió de una forma muy natural. Bandiz Studio fueron los encargados de la dirección y producción del clip y quisieron contar conmigo para la parte de dirección de arte. Esta fue la primera colaboración que hicimos juntos y desde entonces trabajamos de forma puntual en diferentes proyectos personales y comerciales.

Hace unos meses publiqué con ellos en ‘Black Red Blue’, un fanzine de edición limitada que realicé en serigrafía con diferentes dibujos y estampados inéditos.

¿Tienes pensado hacer más colaboraciones de este tipo?

Me encantaría seguir trabajando en proyectos así. Hace poco que acabo de empezar a realizar la dirección de arte en un proyecto editorial y estoy en medio de la producción de un spot publicitario. Recientemente también participé en la campaña de Loewe Men SS19 dirigiendo el diseño de utilería.

Llevas desde 2015 trabajando en tu propia marca y este año has dejado tu segundo trabajo para centrar todas tus energías en tu proyecto personal ¿Qué balance haces de estos cuatro años?

Es un balance muy positivo. Cuando empiezas con una firma todo es nuevo; te emocionas cuando llegan tus primeras etiquetas o ves el producto en su packaging; luego aprendes a mejorar colección a colección los acabados de tus productos, aprendes a seleccionar un mejor tejido o una buena tienda donde el público entienda bien tu producto.

Ahora echo la vista atrás y he aprendido mucho en estos cuatro años. Lo importante es saber mejorar año tras año y siempre ser fiel a los valores de tu marca.

 

 

¿Cuáles serán los próximos pasos de mariaramirez?                 

En estos momentos estoy produciendo nuevos productos textiles: bolsos de mano, almohadones y nuevos pañuelos.

Este mes de Noviembre participo en una exposición de producto que se titula “Mujer.Objeto” donde he creado, en colaboración con una buena amiga, un Kimono.

Quiero seguir haciendo proyectos que transmitan cosas. Que la gente se sienta identificada con la marca y todos los proyectos que hacemos.

La colección se presenta en Madrid el 30 de Noviembre en espacio Estudio Báltico [Calle Moratín 42, 28014 Madrid] y Valencia el 14 de Diciembre en Sebastian Melmoth Store [Carrer de Sant Ferran, 17, 46001 Valencia].

 

Créditos
Fotografía y dirección de arte de María Ramírez
Estilismo de Diego Losada
Asistente de fotografía y producción: Lucía Gómez Meca
Modelos: Ding Ding & Ke Lu