Eyelines inversos, cejas y labios borrados, rostros pálidos, párpados cubiertos por sombras frías o miradas iluminadas. Estas son solo algunas de las propuestas beauty otoño – invierno 2024 que nos deja la semana de la moda de París. En #VEINDIGITAL repasamos los looks más arriesgados y las ideas más sorprendentes para la nueva temporada.

Dries Van Noten / Rick Owens / Dior

Forma parte de las cuatro capitales de la moda, sin embargo, Paris Fashion Week es única e irrepetible, además de la más esperada por el público. En esta nueva edición otoño – invierno, hemos podido ver hombreras XXL, transparencias o estilo boho chic, pero el plano textil no es el único que nos deja con la boca abierta. El mundo beauty también ha revolucionado la capital francesa, Dior, Chanel, Rick Owens, Givenchy o Rokh han sido algunas de las firmas que han desfilado por las pasarelas presentando sus look más icónicos.

DIOR

La firma parisina Dior, eclipsó al público con un maquillaje sorprendente a la par que fresco. Como protagonista del beauty look se encontraba el rosa, concretamente el rosa frambuesa, aplicado en el primer tercio del párpado, incidiendo en el lagrimal, donde era depositado la mayor cantidad de producto. En el resto del ojo se podía intuir una fina y difuminada línea de pigmento cubriendo al ras de pestañas. Sucedía lo mismo en el párpado inferior, pero solo cubriendo el primer tercio, sin llegar al iris. Por su parte, el resto del maquillaje destacaba por una piel luminosa, jugosa y natural, que respetaba el ovalo facial de las modelos, resaltando el glow en los puntos más álgidos de rostro, los labios se mostraban desnudos, pero hidratados, mientras, el cabello fue peinado con moños para centrarse en el maquillaje.

CHANEL 

Chanel irrumpió en la pasarela con looks de inspiración entre los años 30 y 70, fusionando la elegancia con la comodidad. Un hecho que traspasaba las prendas y se adaptaba en el maquillaje y peinado de las modelos. Con tez natural, fresca y radiante, el look destacaba por el hundimiento en el hueso del pómulo acompañado de un ligero toque en tonalidad rosada. Los labios eran maquillados en tonos naturales como nude o teja, mientras el cabello, estaba atado en coletas bajas decoradas con lazos de diferentes colores o grandes sombreros. El foco del makeup se encontraba en los ojos, maquillados de diferentes colores como el rosa, azul, verde, pero con un toque en común, la luminosidad que desprendían las miradas. El lagrimal era vestido por un halo de luz, despertando el ojo y creando mucho más volumen.

RICK OWENS 

Rick Owens sabe como deslumbrar, cautivar y revolucionar la pasarela con su puesta en escena, y esta vez, no ha sido diferente. Los modelos fueron cubiertos por diferentes mamelucos, donde el maquillaje destacaba de manera excepcional. Bajo una piel perfecta, blanquecina y cejas borradas, los pómulos eran grandes protagonistas, creando profundidad y resaltando las facciones del rostro. El rubor estuvo ausente, pero los labios eran definidos de forma perfecta perfilando y creando volumen, gracias a las cejas decoloradas, el marco de la mirada se mantenía mucho más abierto, en él emplearon sombras frías creando un look rasgado y mezclado con un cut crease, que dejaba el párpado móvil desnudo. Además, la línea inferior de pestañas y de agua era delineada con un eyeliner en tono rojizo.

ROKH 

Rokh irrumpía en la pasarela desmontando los cánones de belleza establecidos por la sociedad y luciendo un ojera incipiente y marcada. Las modelos lucían un maquillaje acentuando el primer tercio del párpado, llegando al inicio de la ceja y profundizando dentro de los ojos. A su vez, con la misma sombra fría, su párpado inferior era maquilado, enfatizando en el hundimiento natural. Para dar un toque de luz, superpusieron un lápiz luminoso champán, aplicado en el lagrimal y creando una fina línea al ras de pestañas superiores. Los labios lucían un aspecto jugoso, al igual que sus cejas, peinadas y definidas. El cabello fue el gran protagonista del desfile, bajo un efecto wet y con múltiples baby hairs colocados con gusto en los rostros de las maniquíes.

JUNYA WATANABE 

Junya Watanabe eliminó prácticamente todos los elementos beauty dentro de su iniciativa para este otoño- invierno. Como centro de la propuesta se encontraban rostros pálidos, presentando una ojera hundida, sin camuflar, con cejas y labios borrados, o pestañas sin un ápice de máscara. Sin embargo, se puede intuir un ligero rubor rosado en las mejillas y tabique nasal, creando un efecto quemado en la piel de las modelos. A su vez, aunque el párpado se encuentra desnudo, han utilizado en la línea inferior de agua un lápiz en tono crudo, ideal para abrir la mirada, además de un pequeño y discreto golpe de luz en el lagrimal. El cabello fue peinado bajo un efecto mojado perfecto, con raya en el medio, para enmarcar y reforzar las facciones.

DRIES VAN NOTEN 

Bajo flequillos xxl, coletas y moños, Dries Van Noten presentó una propuesta llena de color para la temporada que viene. Con ojos tapados por el cabello que colgaba sobre la frente y llegaba prácticamente hasta el final de la nariz, el diseñador belga quiso que los labios fuesen los grandes protagonistas dentro del desfile, maquillados  y perfilados en tonalidades sorprendentes como el gris, amarillo, morado, borgoña o rojo. El diseño de labios era repetido en cada modelo, marcando el arco de cupido y dándole un punto de luz para elevar la forma. El rostro era maquillado en tonalidades naturales, marcando el hueso del pómulo, para crear mayor profundidad, mientras, las mejillas se encontraban practicante desnudas.

GIVENCHY

Con la raya del pelo en el medio, piel natural y un eyeliner marcado, Givenchy, presentó su nueva colección cargada de propuestas virales. La tez parecía perfecta, bien definida, con toques más oscuros en los hundimientos del rostro y la luz exacta en los puntos más altos. Mejillas naturales con tonos melocotón y labios al descubierto, casi desnudos, cejas sin maquillar, tan solo peinadas, aportaban al look una armonía perfecta para dejar como único protagonista el delineado. En este caso, la firma francesa optó por un eyeliner inverso, es decir, el rabillo salía de la parte inferior del párpado uniéndolo a la parte posterior delineada con una fina línea pegada a pestañas superiores, la waterline inferior y superior fue maquillada en tono negro, aportando más dureza a la mirada. Por su parte, las pestañas pasaron totalmente inadvertidas dentro del makeup, ya que no fueron maquilladas, aunque el kohl, creaba una sensación más opaca.