En efecto, Yoko Ono sigue queriendo ir más allá, y esta vez, sin ser la primera, se centra en la mujer. Quiere hablar de la violencia de género, de las desigualdades entre sexos y en definitiva, de poder dar voz a todas aquellas mujeres a las que, por diversas circunstancias se les ha negado la palabra.
Del mismo modo, con este proyecto, la artista propone que todas las mujeres que hayan vivido alguna situación desafortunada por el hecho de ser mujer escriban sus testimonios y sus pensamientos en su idioma y con sus propias palabras, junto con una foto de sus ojos, con la idea de que todos podamos ver el mundo desde la mirada de estas mujeres gracias a sus memorias, y así llegar al entendimiento y dar un paso cada día más grande contra la violencia de género. Tanto las imágenes como las declaraciones se envía a la dirección de la Galería Listasafn Reykjavíkur,que es el medio que está apoyando el proyecto (Tryggvagata 17, 101 Reykjavík) o al mail de la misma (g@reykjavik.is)
«Escucha a tu corazón, respeta tu intuición, manifiéstate, no hay límites. Ten coraje, ten rabia, estamos todas juntas. Sigue a tu corazón, usa tu intuición, manifiéstate, no hay confusión». Ese es el lema de Yoko Ono, una de las artistas que han hecho que la presencia en el arte sea cada vez más notable y que desde los años 60 y 70 ha luchado por un mundo igual y libre.
