Barbara Kruger, la artista que dio la vuelta al concepto de publicidad

02 / 04 / 2020
POR Peña Fernández

A través del arte gráfico reflexiona sobre cuestiones como la desigualdad entre géneros, el clasismo y la sociedad de consumo.

“Thinking of You. I Mean Me. I Mean You” da título a la mayor muestra de la artista gráfica Barbara Kruger (1945) que podrá visitarse en el Instituto de Arte de Chicago desde el 1 de noviembre de 2020 al 14 de febrero de 2021.

Imposible ignorar su particular estilo con el que, combinando la fotografía con sus características letras blancas sobre un fondo rojo, lanza un mensaje sobre el que reflexionar, el suyo es un arte reivindicativo. La exhibición reunirá los trabajos producidos por la artista durante cuatro décadas, entre lo que podremos encontrar piezas poco conocidas por el público de principios de los ochenta, en forma de instalaciones de gran tamaño, vídeos y paisajes sonoros.

Homenajeando la decisión de la artista de llevar sus obras al espacio público para que interactúen con los pasantes, el proyecto toma un rumbo dinámico y  superando los límites físicos del museo, utilizará las obras de Kruger en vallas publicitarias, billetes de transporte público y autobuses, involucrando a la ciudad de Chicago.

A esta exhibición, seguirán la de Nueva York en el MoMA, la de Londres en la Hayward Gallery durante el otoño de 2021, y por último, en Los Ángeles en el County Museum of Art.

La envergadura del proyecto evidencia el interés suscitado alrededor de la figura de Barbara Kruger, pero ¿a qué se debe?

Origen de su espíritu crítico

Barbara Kruger nace en el seno de una familia de clase trabajadora en Newark, Nueva Jersey, una ciudad dominada por la pobreza y el racismo. Es en este contexto es donde empiezan a tomar forma las ideas sobre el poder, la jerarquía y marginación que más tarde determinarán su trabajo.

 

De las revistas al museo

Tras estudiar arte y diseño en Parsons en Nueva York, trabajó para Condé Nast Publications y para la revista «Mademoiselle» dirigiendo el área de diseño. Más tarde en California realizó trabajos como diseñadora gráfica, directora artística y editora para las revistas «House and Garden» y «Aperture». Todas estas experiencias influenciaron enormemente sus obras artísticas.

Su primera etapa como artista se centró en materiales textiles, técnica que se prolongó hasta principios de los ’70, cuando se produjo el cambio hacia la fotografía, el medio con el que mejor sabría proyectar su creatividad y que la llevaría al éxito

Estilo propio

Es conocida mundialmente por su arte gráfico que utiliza fotografías en blanco y negro sacadas de la publicidad a las que sobrepone eslóganes con el objetivo de emitir un nuevo mensaje. Sus obras toman rasgos del lenguaje visual la publicidad como las letras blancas sobre rojo con tipografía “Futura Bold Oblique” que se han convertido en su  señal de identidad o el uso en sus frases de pronombres ingleses como “you”, “your” “I” , “we” como crítica al lenguaje agresivo utilizado en este medio.

Autobús en Los Ángeles con obras de Barbara Kruger fotografiado por Steve Cohn/LA Fund

El arte como reivindicación

De estilo provocativo, su obra puede clasificarse como propaganda del anti-consumismo, de la defensa de los derechos de las mujeres y de la igualdad. Pone en duda los estereotipos que se crean en nuestra sociedad y cuestiona el poder, la sexualidad y la representación.

Su obra no se limita a su exposición en museos, sino que ha podido observe en espacios públicos de diferentes ciudades al utilizarse en vallas publicitarias, estaciones de trenes, parques o en revistas, periódicos… es su lucha contra la sociedad consumo y la sobreexposición a la publicidad.

 

Kruger y la idea de género

En sus obras, Kruger ataca a los prototipos y hace reflexionar en cómo y quiénes han creado la imagen femenina así como sus gustos y carencias, entendiendo el género como una construcción producida a través de la representación y no una condición natural.

También dedicó algunos trabajos a mujeres del campo artístico poco reconocidas con obras como «Homenaje a Gunta Stölzl» (1972) que sería publicada al año siguiente en la revista Ms.