Desde el bolso Dionysus con cierre de cabeza de tigre, hasta sus emblemáticos mocasines Horsebit con hebilla en forma de estribo, los accesorios de la marca italiana son la base de su reciente éxito comercial. En 2017, los artículos de cuero y calzado de Gucci representaron más del 70% de sus ingresos anuales. Ahora, en un intento por sobresalir e innovar en esta área, la casa ha presentado su ArtLab, una nueva instalación de 37,000 metros cuadrados, que por primera vez en la industria del lujo, actuará como centro para la producción de ambos artículos.
Situado cerca de la sede histórica en Casellina, el laboratorio dará trabajo a más de 800 personas dedicadas exclusivamente a hacer realidad las ideas del universo onírico del director creativo Alessandro Michele. Pero, sobre todo, a satisfacer la creciente demanda de artículos de Gucci. Un espacio centrado en preservar el saber hacer artesano y la innovación en los procesos de fabricación, así como la experimentación con nuevos materiales y técnicas.
El nuevo ArtLab es para Marco Bizarri, presidente y director ejecutivo de la firma, “un testimonio de nuestra fe en la creatividad, la artesanía, la innovación y la tecnología, la sostenibilidad y el vínculo con nuestra tierra.” “Es la expresión tangible de un lugar en el que adquirir destrezas y aprender técnicas, un taller en el que crear ideas, y las ideas son el alma de la cultura”.
La apertura de este novedoso centro de excelencia representa el pilar de la nueva plataforma industrial de Gucci. Además de una prueba más del compromiso de casa italiana con la sostenibilidad y la innovación de materiales.
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