‘Cyberdestroyed’, o cómo hacer de la moda un bálsamo reparador frente al bullying

23 / 03 / 2021
POR David Alarcón

Valeria Muckenschnabl, fundadora y directora creativa de la firma emergente MUSH, revive una experiencia traumática para cerrar un capítulo marcado por el acoso en redes.

‘Cyberdestroyed’, la nueva colección de MUSH / Fotografía: Jordi Terry

En un contexto en el que la moda parece haber perdido parte de su esencia, amenazada por la tendencia a la homogeneidad, fruto de la globalización, las efímeras tendencias y la preponderancia del significante sobre el significado, Valeria Muckenschnabl acude a sus propias vivencias como forma de expresar y canalizar sentimientos, emociones y personalidades. Y lejos de adentrarse en un capítulo de júbilo y disfrute, se sumerge (y rememora) un trágico episodio del que fue víctima con tan solo 18 años, definido por el acoso constante, la exposición pública sin consentimiento alguno y una insistente campaña de derribo hacia su persona. “Ahora, una vez realizada esta colección, me doy cuenta de que ya no tengo miedo. He vuelto a confiar en mí, que es lo más importante”, comenta proyectándose hacia un esperanzador futuro.

Cyberdestroyed es su nuevo proyecto, el cual presenta bajo el nombre de su marca de moda MUSH, fundada en septiembre de 2020. Una colección que, partiendo de cuatro de sus ídolos -entre los que encontramos a Amy Winehouse o Yohji Yamamoto– verbaliza su injusta y dramática experiencia, poniendo especial énfasis en las emociones humanas que experimentó en primera persona en este tiempo. “La ansiedad, la burla, la traición y el vacío son algunos de los sentimientos que expreso mediante mis prendas”, añade. Un torbellino de adversidades cuya rotación se vio acelerada por las redes sociales, tan beneficiosas como dañinas dependiendo del uso que se les de. Ahora, Valeria dice haber recuperado la confianza en sí misma, después de haber llegado a dudar de su propia identidad. “Lo que un día fue mi debilidad, hoy es mi fortaleza”, sentencia.

Hablamos con la joven diseñadora sobre el mensaje (y la experiencia) que encierra Cyberdestroyed, su opinión acerca de la formación de moda reglada y sus planes de futuro.

¿Quién es Valeria Muckenschnabl? 

Aunque mi apellido suene un poco complicado, soy una persona sencilla amante del arte que desprende el mundo de la moda. No me gusta cerrar los ojos sin ver un pedacito de desfile de algún gran diseñador que me que me inspire y al que admire, una soñadora que solo se ilusiona pensando en que el día de mañana pueda destacar en este gran mundo de la moda. Siempre agradecida con todas esas personas dispuestas a ayudarme y a ampliar mi aprendizaje en todo el recorrido del diseño, y que sobre todo lucha por superar cada fracaso, cada bache que se interpone en el camino, y que jamás, jamás se rinde ante un “no”.  

Entiendes la moda como una forma de dar voz a distintas emociones, sucesos y personalidades. Y eso es lo que haces precisamente con tu marca, fundada hace apenas seis meses. Pero, ¿en qué momento y de qué forma se produce tu primera aproximación a este sector? 

La verdad es que desde mi infancia siempre he estado cerca de este sector. Mi familia tenía una humilde tienda de moda en la que yo disfrutaba y tomaba pequeñas decisiones, tales como la elección de ciertos tejidos; e incluso diseñaba algunas prendas. Fue en este instante, con tan solo 14 años, cuando descubrí que mi verdadera pasión era y es lo que a día de hoy estudio: la moda.  

Actualmente estudias Diseño de Moda en la Escuela de Arte Superior de Diseño de Valencia. ¿Qué te ha aportado la formación reglada? ¿Es ésta una buena forma de conocer cómo funcionan los engranajes de la industria desde dentro? 

Mi formación académica orientada hacia el mundo de la moda es clave en mi carrera profesional. Cada una de las asignaturas me aporta nuevos aprendizajes que me ayudan cada día a seguir ampliando mis conocimientos.  Lo cierto es que cuando comencé esta carrera no tenía ni idea de lo profunda que podía llegar a ser la moda. Se podría decir que la veía desde una perspectiva más superficial. Aquí es cuando, por segunda vez en mi vida, sabía que estaba estudiando lo que me ilusionaba desde niña y lo que me entusiasma siendo adulta.  

Sin embargo, imagino que recurres a otro tipo de recursos más allá de lo académico. ¿Cómo es tu relación con la moda en tu día a día? 

En mi tiempo libre intento instruirme viendo desfiles y contenido de moda. Además, soy fiel seguidora de todos aquellos usuarios y cuentas en redes sociales que me aportan contenido único y subjetivo de este amplio mundo de la moda.  

 ¿Quiénes son tus principales referentes? ¿Hay alguna década o movimiento que te haya marcado especialmente?  

Estoy en constante búsqueda de nuevos referentes, pero para este proyecto en especial, me he basado en cuatro de mis ídolos: Kate Moss, Yohji Yamamoto,  Amy Winehouse y Billie Eilish. La mayoría de veces me inspiro en la década de los noventa, el streetstyle, y la estética del “heroin chic”. En especial, el “streetgoth”, lo gótico y la moda urbana. 

Ahora presentas uno de tus grandes proyectos, bajo el título de Cyberdestroyed, inspirado en un suceso de tu vida. ¿Qué nos puedes contar acerca de esta iniciativa? 

Principalmente, he decidido transmitir mediante la moda todos aquellos sentimientos que  viví en una etapa de mi vida. La ansiedad, la burla, la traición y el vacío con algunos de los sentimientos que expreso mediante mis prendas.   He estudiado los diferentes abusos que sufre la sociedad día a día respecto a este tema. Por ello, escogí algunos modelos que habían sido acosados en algún momento de su vida, con el fin de empatizar todavía más con el espectador. De esta manera, he logrado cerrar un ciclo de mi vida del que hoy puedo decir que he aprendido. 

Lejos de ser una colección de moda al uso, el proyecto es el resultado de una vivencia que se plasma a través de una composición en la que las propuestas textiles conviven con la fotografía, un casting diverso y elementos extraídos del universo online. ¿Cómo definirías tu proyecto en una sola frase? ¿Qué disciplinas convergen en el mismo? 

Perdición, cierre de un capítulo y reencarnación. En la comunicación he querido representar la sensación y posición en la que he estado este tiempo, la persecución, la intranquilidad y la falta de privacidad. Todos estos sentimientos están representados tanto en las prendas como en el estilismo, la fotografía, la escenografía y la puesta en escena. 

“Trata de una parodia que realizó un influencer reconocido internacionalmente utilizando material en el que aparecía”, explicas en el manifiesto que acompaña a la colección. ¿Puedes contarnos más acerca de este hecho, que has tomado como punto de partida? 

Este suceso ocurrió en el 2018, cuando tan solo tenía 18 años. En ese momento, mis redes sociales tenían un gran número de seguidores y parecía que me había convertido en una imagen pública, siendo completamente inconsciente del impacto que esto podía suponer. Una noche, caminando por las calles de Valencia, realicé un vídeo en el que me mostraba feliz, cantando y bromeando junto a un amigo. Fue en ese instante en el que un seguidor de mi cuenta privada decidió malinterpretar mis palabras, y comenzó una campaña negativa contra mí, grabando dicho vídeo y difundiéndolo a su libre albedrío. Esto llegó hasta personas muy influyentes en redes, y aún a día de hoy se siguen viendo nuevas publicaciones en las que aparezco en varias cuentas reconocidas. 

El proyecto está inspirado en el cyber-bullying, un tipo de acoso que de acuerdo a los últimos informes, han padecido cerca del 7% de los estudiantes españoles. Y lo más preocupante es que tres cuartas partes de las víctimas no lo cuentan por miedo a las represalias, e incluso por vergüenza. ¿Cómo afrontaste tú esta experiencia tan traumática?  

Pues al principio siempre decides ir por el camino “fácil”, mostrándote fuerte e indiferente. Pero al pasar el tiempo, descubres que lo único que estás haciendo es mostrar algo que no es real. Sin embargo, creo que esta situación me ha ayudado a encontrar una nueva versión de mi. He conocido personas increíbles, he aprendido a confiar de nuevo y me he vuelto una persona más transparente. Y es ahora, una vez realizada esta colección, cuando me doy cuenta que ya no tengo miedo, porque he vuelto a confiar en mí, que es lo más importante. 

¿Cómo ha sido el proceso de verbalizar -a través de la moda- este hecho que desgraciadamente conociste de cerca?  

No saber quién eres es muy frustrante. Después de escuchar tantas críticas negativas ya pierdes la verdadera visión de ti mismo/a. Por eso quise representar primeramente el vacío tan fuerte que sentí, la perdición y los altibajos que se viven en este proceso. En mis diseños he querido plasmar este concepto mediante volúmenes, tejidos, transparencias y asimetrías, con el objetivo de expresar la traición y el vacío durante y después de este suceso. El proceso de decadencia que vive la víctima y las inseguridades que se le presentan ante su propia personalidad. 

No obstante, en algunas de las imágenes de campaña vemos a los modelos sonreír mientras se abrazan, en una actitud relajada. ¿Es este un mensaje de optimismo hacia todos aquellos que están siendo víctimas de acoso a día de hoy? 

Estas fotografías han sido una manera de demostrar la fuerza y la superación. Los modelos han sido elegidos intencionadamente de nacionalidades y razas distintas. Con ello he querido demostrar que el color y los rasgos no tienen que ser un motivo de bullying, sino un motivo de unión. Puedo decir que he logrado liberarme de esta mochila llena de piedras con la que sufrí y de la que hoy he aprendido. Así que sí, me muestro optimista, porque lo que un día fue mi debilidad hoy es mi fortaleza.  

 

¿Qué mensaje te gustaría lanzarle al mundo? 

Debemos ser conscientes de que todos somos humanos y es habitual cometer errores, pero lo importante es aprender de ellos y mejorar día a día. El mundo debe saber que la unión hace la fuerza y lo contrario nos debilita. 

Y mirando hacia el futuro, ¿dónde te gustaría ver tu marca posicionada de aquí a 5 años? 

En este momento, quiero seguir trabajando la moda de manera conceptual, porque he descubierto que me apasiona y creo que me puede llegar a aportar recursos que el día de mañana utilizaré en una moda mucho más comercial. En un futuro, me encantaría ser reconocida a nivel internacional, mostrando el nexo que tiene el arte y la cultura con la moda, el cual todavía está por descubrir.

Créditos:

Fotografía: Jordi Terry
Estilismo: Jesús Sanmartín
MUAH: Pilar Lozoya  Let’s Makeup School
Modelos: Clara Solá, Luiggi Wahnon, Jady Sow, Carolina Abeso, Mario Abeso de 5.0 Models Management