«El desayuno de la felicidad» contra la depresión de los millennials

10 / 09 / 2017
POR Kike Adela

El desayuno es según muchos la comida más importante del día, pero ¿podría ser la cura a la depresión de los millennials?

Como cualquier adolescente del siglo XXI, mi salud mental es cuestionable. Creo que ninguno de mis amigos saben lo que es ser feliz 24/7, y es que parece que en esta era millennial no estar deprimido es misión imposible. ¿Será por nuestra adición a las selfies? ¿La ruptura de One Direction? ¿O que ese chico tan mono no nos ha dado match en Tinder? En cualquier caso, estamos más tristes que nunca. Según la OMS la depresión afecta a 300 millones de personas en todo el mundo y alerta que entre 2005 y 2015 el número de casos se ha incrementado en más de un 18%.

Conscientes sobre el problema, la comunidad internacional de gente que se preocupa por las cosas está buscando causas y soluciones. Selena Gómez por ejemplo, se fue de retiro espiritual sin teléfono durante 90 días, y parece que le ha funcionado. Pero para los que no tenemos dinero para un rehab con spa o caché suficiente como para salir con The Weeknd, traigo buenas noticias, la solución podría estar en el desayuno:

Kevin, Barcelona.
Pan moreno con queso y aguacate, dinero, un Gucci, fama en Instagram, sexo matutino y un novio hot.

La nutricionista Melissa Brunetti, que centra sus estudios en la relación entre dieta y salud mental, cree que empezar el día con un buen desayuno, podría ayudarnos a estar mentalmente más estables. Y es que el cerebro es el jefazo de nuestras vidas, y si no lo alimentamos bien, poco puede hacer el pobre.

Nutrientes como el Omega-3, amino ácidos, vitaminas del tipo B, D y minerales como zinc, magnesio y hierro son algunos de los indispensables para que nuestro cerebro bien alimentado y contento.
La lista puede parecer larga, pero en dietas con abundante aceite de oliva y verduras de hoja, como nuestra queridísima dieta mediterránea, se encuentran la mayoría de estos esenciales nutrientes. Tanto es así que se han hecho estudios sobre la relación entre esta dieta y la depresión y se comprobó que aquellos que llevaban una dieta mediterránea tenían menos riesgo de caer en depresión.

Pero, ¿cuál sería exactamente el desayuno de la felicidad? Podéis ver las ideas que mis compis de universidad tienen, o escuchar a los nutricionistas:

Herman, Noruega. Bocadillo con tomate, jamón y queso manchego. Batido verde y café fuerte.

Yurij, Ucrania. Zumo de naranja y croissant con mermelada de manzana dentro.

Wooryun, Nato Bibimbap de verduras fermentadas con soja y arroz + sopa de ravioles.

Algo así como unas tostadas integrales, aguacate machacado y huevos serían el antidepresivo perfecto para la mañana. Osea, un #avocadoontoast de influencer neoyorkina de toda la vida.

La teoría reside en que nuestro cerebro es 60% grasa, y esta se consigue a través de la dieta. El huevo, es una parte esencial del mágico desayuno, por sus aminoácidos, Omega-3 y vitamina D. Además, el aguacate, contiene nutrientes como ácido fólico u omega-3, y es rico en tryptophan, un precursor de la famosa serotonina, substancia que nuestro cerebro segrega para hacernos sentir bien. Y aunque el chocolate, NO es mejor que el sexo, a quienes les gusta y les causa placer es por la misma razón, también contiene tryptophan.

Hagar, Amsterdam.
Periódico, bol con avena, café y mesa.

Marthe, Francia.
Baguette con jamón serrano y mantequilla, al lado del mar bajo la sombra de un pino.

Archie, Inglaterra.
English breakfast de su pub favorito, el plato es tan grande como un perro de tamaño medio.

Joana, Brasil.
Papaya y café.

Kike, Mallorca.
Un novio hot que me traiga café con leche de soja.

Más allá de esta combinación mañanera milagrosa, mantener niveles de azúcar en sangre regulares puede igualmente ayudar a sentirnos de buen humor. Hacer tres comidas al día + un snack entre la comida y la cena -así como antes y después de un entrenamiento- nos ayudarán a mantener unos niveles de azúcar equilibrados, y no estar irritables o malhumorados por tener el azúcar bajo.

En definitiva, nuestro cerebro necesita energía para funcionar correctamente, con suficientes nutrientes podrá formular neuro-transmisores y neuroquímicos o regular nuestros niveles de azúcar y hormonas. Comer bien puede ayudar a nuestra salud mental, y claro está que hincharse a aguacate o chocolate no es la cura contra la depresión, pero puede ayudar. Y ya puestos, tener un novio que te traiga el desayuno a la cama, pues también.

#VeinFood