¿Será la ropa compartida el futuro de la moda (sostenible)?

24 / 09 / 2018
POR Belén Rubiales

Toneladas de ropa se van a la basura cada día. El alquiler de prendas podría ayudarnos a avanzar hacia una economía circular.  

Foto: Swanky

 
Comentábamos no hace mucho que la ropa de segunda mano y el constante auge de lo vintage podrían hacer la moda más sostenible y acabar con la economía lineal (comprar, utilizar y desechar). Ahora la conocida agencia británica WRAP, especializada en el aprovechamiento de recursos y economía circular, ve en el alquiler de ropa un modelo comercial innovador que reduciría la producción de material y, por tanto, las emisiones de dióxido de carbono.

El bajo precio de las prendas low cost, sumado al constante cambio en las tendencias y a la errónea creencia de que lo nuevo es siempre mejor, generan la atmósfera perfecta para que anide en nuestra sociedad un apabullante sobreconsumo. Según las estadísticas, cada segundo se arroja a nuestros campos un camión lleno de basura textil, y lo peor de todo es que en la mayoría de los casos esa ‘basura’ recibe un adjetivo completamente erróneo, tratándose muchas veces de prendas que bien pudieran tener una y diez vidas más.

El valor potencial del mercado de alquiler de ropa en Reino Unido se ha estimado en 923.000 libras, siendo un modelo bien establecido para ciertos artículos, como los vestidos de fiesta o los trajes en el caso de los hombres,destinados a bodas o eventos. Sin embargo, fuera del sector lujo parece que los consumidores se muestran reticentes a alquilar, dado que son productos de menor valor y por ende fáciles de adquirir. Y es que, nos preguntaremos, ¿cómo podría introducirse este sistema en muchas de las marcas que conocemos?
 

Montaña de ropa en Ikikik, por Katja Novitskova

 
En Mud Jeans, por ejemplo, ofrecen la posibilidad de alquilar unos jeans orgánicos y pasado un año puedes conservarlos, cambiarlos o devolverlos. La conocida plataforma americana Rent The Runway, una de las pioneras en este sentido, ya ofrece la posibilidad de pagar planes mensuales cerrados que te permiten alquilar un número ilimitado de prendas cada mes, añadiendo una dosis de estilo a tu armario (quién no querría estrenar ropa con cada muda del calendario) y a la vez salvar el planeta. Parece que así pinta un futuro esperemos que no tan lejano, donde ya no seremos asiduos a tal o cual marca, si no que nos convertiremos en abonados de la misma.

En definitiva, lo mires por donde lo mires, alquilar ropa es bueno para ti, satisface ese deseo de tener algo nuevo, cuida el medioambiente. Como dicen desde Rent The Runway: save time, save money, save the planet (ahorra tiempo, ahorra dinero, salva el planeta).