La obra de Guillermo Lorca y la ciudad de Barcelona están íntimamente relacionadas en ‘El Esplendor de la Noche’, exposición que puede visitarse en el MOCO Museum. En #VEINDIGITAL hablamos con él y compartimos este editorial que gira en torno a la expo, su inspiración y sus referentes.
Tras la pandemia, Guillermo Lorca, artista chileno llega a Barcelona para unirse al MOCO Museum con la exposición ‘El Esplendor de la Noche’. La muestra, la conexión con artistas y nuevos referentes, nos llevan a querer retratar a Lorca más allá de sus obras. Permitir que lo indómito baile entre lo consciente y lo inconsciente, la luz y la oscuridad, lo profundo y lo sublime. En esta sesión encontramos localizaciones clave en la ciudad de Barcelona como el Macba, el MOCO Museum, la Casa Battlò, el propio piso del artista, lugares elegidos con una razón: ser el marco de sus obras, explorar esa relación entre el estilo artístico de Guillermo Lorca y la ciudad en la que hoy reside y se inspira en esta nueva colección.
En ‘El Esplendor de la Noche’ dos cuadros del artista son posible observarlos con realidad aumentada y es eso lo que simbolizamos en aquella foto, cómo las flores de gran tamaño sobresalen de los óleos teniendo así una innovadora experiencia inmersiva que se transforma en un momento mágico y te haces parte de la creación misma)
¿Qué trabajos tuyos encontramos en ‘Esplendor de la noche’?
Mayoritariamente son trabajos pintados durante la pandemia. La exposición el primer año contaba con 7 pinturas de gran formato. El museo me pidió prolongar la exposición hasta noviembre de este año con una pieza inédita pero tuve que devolver a sus dueños algunas de las pinturas por lo que ahora son 5 de gran formato en el gran salón del Museo.
Has recibido todo tipo de clasificaciones en lo que se refiere a tus obras, desde el barroco, el realismo, incluso hiperrealismo pero ¿Qué tipo de artista te consideras?
Me considero un pintor figurativo cercano al simbolismo y al decadentismo de principios del siglo XX, aunque con una estética más cerca al barroco en lo que respecta a la composición, todo esto aderezado por una mirada contemporánea inevitable por los muchísimos referentes que tengo que son de nuestra época.
¿Hay un mismo hilo conductor en todo lo que creas?
Pienso que sí. Es como una historia que me llega en partes fragmentadas que espero algún día poder unir.
“Es una especie de diario simbólico, un viaje a través de las sensaciones inconscientes que han estado presentes en mi vida” ¿Cuáles son estas sensaciones?
Son sensaciones difíciles de poner en palabras, pero que asocio a imágenes. Son momentos de la infancia, lugares en la mente que me hacen sentir conectado con algo muy antiguo, casi como de unas vidas pasadas. No es que eso sea mi creencia pero es la sensación, a ratos siento que me hago cargo de los traumas de mis ancestros.
¿Cómo fue para ti la etapa covid? ¿Qué sensación te genera recordar esa época?
Ahora no me genera una sensación mala, un truco útil por parte del cerebro, pero es un engaño. Si bien tuve momentos intensos en el plano poético, por decirlo de alguna forma, fue una época tremendamente angustiosa, en especial el primer año. Estuve desproporcionadamente paranoico y con síntomas de todo tipo, fue una oda al fatalismo y la hipocondría, eso sí, en retrospectiva pienso que aprendí bastante.
¿El arte para ti es una terapia?
Para momentos muy fuertes sí, es una forma de darle un curso simbólico al vacío que pueden dejar la existencia.
¿Cuál es tu relación con la ciudad de Barcelona?
La primera vez que estuve en Barcelona el 2007 apenas tengo recuerdo ya que tuve varias crisis de pánico y un insomnio maratónico y tuve que “huir”. Luego me reencontré con la ciudad el 2015 y mi me enamoró, es preciosa, escala humana, buen clima, dinámica, con gente de todo el mundo y los de acá con un acento muy bonito.
¿Cuáles son tus zonas favoritas de la ciudad? ¿algún rincón preferido?
Por supuesto, hay monumentos y zonas preciosas que coinciden con las más turísticas, como Paseo de Gracia, las noches en el Born, Plaza España, etc. Pero por alguna razón tengo unos sentimientos muy fuertes con la zona de Poblenou, cerca del Museo del Diseño. No sé por qué me lleva a una infancia olvidada.
¿Qué impresiones tienes respecto a la exposición en el Moco?
Me ha gustado mucho lo que ha pasado. He podido presentar mi obra con varios artistas fuertes en la escena contemporánea pero que contrastan mucho con mi pintura que es técnicamente más tradicional. Ese contraste pienso que le hace bien y el público ha sido tremendamente entusiasta y receptivo, por lo que me siento muy afortunado.
Dices que los museos tienen un carácter sagrado, como si se tratara de un templo, es el Moco donde las obras de Lorca tienen que estar ¿es su templo?
Bueno, no hay un solo templo, pueden ser distintos museos, hay muchos que me encantan y la lista sería algo larga. Ante todo el Museo es un espacio de contemplación que tiene la misión de preservar y dar acceso a los tesoros de la humanidad, estén de moda o no. Me gusta mucho la función de los Museos en ese sentido.
¿En qué otros proyectos trabajas actualmente?
Estoy trabajando para el Armory Show en Nueva York, Para una exposición en Seúl y algunas cosas en Chile y México que están en conversaciones. Necesito urgentemente un periodo de introspección y de encontrar algunas nuevas fuentes de inspiración por lo que este año planeo ir a Kenia, a Japón y Corea que me muero de ganas de conocer.
Este editorial tiene previso estar expuesto en Barcelona y Chile durante el segundo semestre del 2023.
Créditos
Equipo:
Fotografía: Paz Carrillo
Asistente de fotografía: Josefina del Villar
Producción: Florencia Sánchez
Asistente de arte: Antonio Contreras
Dirección de arte: Mónica Machín
Estilismo: Tania Morenilla
Asistente de estilismo: Mara Mancini
Maquillaje: Paula Barjau
Modelxs:
Eliana Bertolusso
Julián Ballon
Facundo Reniero
Andrés Schwerer
Nena Toro
Sofía Casals
Aria Afrashteh
Claudia Deulofeu
Olha
Aurelius
Agradecimientos marcas:Jean Paul Gaultier, Acne Studios, La Manso, Juan Vg.