Carmen Herrera, pionera de la abstracción geométrica

19 / 08 / 2022
POR Alba Rubio

La artista de origen cubano fallecida a los 106 años, triunfa hoy en los principales museos del mundo. Descubre aquí las claves de su obra.

Carmen Herrera, es considerada una pionera de la Abstracción geométrica y del Modernismo Latinoamericano y, sin embargo, sus pinturas de colores vibrantes y formas geométricas pasaron inadvertidas durante décadas para triunfar a la edad de 89 años.

Nacida en La Habana en el seno de una familia acomodada, su biografía, en la que se entremezclan una infancia en la Cuba pre-revolucionaria, el París de la posguerra y el floreciente mundo del arte neoyorquino, cuenta con todos los ingredientes para convertirla en una leyenda del mundo del arte contemporáneo.

Herrera estudió arquitectura en la Universidad de Cuba, desde donde se trasladó a París, ciudad en la que entabló amistad con intelectuales de la época como Simone de Beauvoir o Jean-Paul Sartre. Su estancia en la capital francesa fue fundamental en la definición de su trabajo, influenciado por la abstracción geométrica de Malévich, Mondrian o Sonia Delaunay. Sin embargo, no triunfó a su llegada a Nueva York, donde ya imperaba el Expresionismo abstracto. Tras una vida dedicada a los pinceles sin esperar reconocimiento, el éxito le llegó en 2004, con la venta de su primera obra a la edad de 89 años.

“La línea recta es para mí el principio y el final. Empiezo mis cuadros con una línea recta horizontal o vertical y a partir de ahí surge la lucha. La geometría es la estructura de la poesía. Y hay poesía en mi visión pictórica.” – Carmen Herrera

Sus composiciones minimalistas llenas de líneas rectas, formas y color crean una variedad infinita de movimiento, ritmo y tensión espacial. Con ecos del pop art sus configuraciones geométricas minimalistas en blanco y negro, donde los triángulos, los trapecios o los semicírculos flotan en un universo de colores brillantes. Su rechazo a abrazar cualquier movimiento la hizo libre para experimentar y trabajar solo conforme a su inspiración sin depender de las corrientes en boga ni las demandas de galeristas.

Una mujer que no solo superó el techo de cristal del género y la etnia, sino también el de la edad. Hoy, sus pinturas forman parte de las colecciones permanentes de instituciones como el MoMA de Nueva York, el Museo Hirshhorn de Washington o la Tate Modern de Londres.