Tras la polémica salida de Albert Elbaz de la casa Lanvin, Bouchra Jarrar debuta como nueva directora creativa con este lookbook.
Sin ánimos de entrar en la polémica sobre el poder de los sexos, la realidad por los momentos es que la dirección creativa de la moda está dominada por el masculino. Ahora bien esto parece estar cambiando un poco. Sin querer entrar en rumores, pero suena, y muy fuerte, que Maria Grazia Chiuri, actualmente una de las diseñadoras creativas de Valentino, abandonará a su compañero Pier Pablo Piccoli para tomar las riendas de Dior. Esta sería la primera vez que la gigante casa de moda nombra a una mujer en el mando creativo. Chiuri ha sido un éxito comercial y creativo para Valentino, por lo que esta unión promete y emociona.
Hoy en día, como mujeres que sobresalen en el negocio tenemos a Sarah Burton, Donatella Versace, Miuccia Prada y Phoebe Philo (entre las más importantes). Bouchra Jarrar, la nueva directora creativa para Lanvin pareciera que se está sumando a este poderoso grupo. Tras la forma poco ceremonial en la cual Albert Elbaz fue despedido de la marca y la reacción del mundo de la moda condenando enérgicamente lo ocurrido, será un reto para Jarrar canalizar una colección que logre cautivar al mercado de Lanvin, así como a los críticos.
La diseñadora Francesa, quien viene de las escuelas de Balenciaga y Christian Lacroiix, de manera grata e inteligentemente ha sorprendido a los editores internacionales, cuando hace unas semanas presentó en NYC una previa de su colección que se mostrará por completo durante la semana de la moda en París a finales de septiembre. Jarrar logró combinar lo que se puede denominar como “haute cool” una forma de minimalista del lujo, combinando tonos claros, más femeninos, que recuperan el legado del fundador de la marca y no necesariamente conectado al estilo rebelde de Elbaz, pero tampoco rompiendo o distanciándose del trabajo del mismo. No es un cambio drástico, pero sí demuestra identidad propia.
Jarrar, quien constantemente repite su admiración y respeto por Elbaz, sorprendió al no mostrarse intimidada por la trayectoria de la marca antes de su llegada (y vale que es difícil pensar que se pueda superar al talentoso Alber Elbaz). Sin embargo, la inteligencia de esta directora creativa consigue hacer de la firma algo suyo sin distanciarse de su fundador.
La colección es muy fuerte en el atuendo del día a día, que se torna en prendas fáciles de usar para un cocktail. Creo que es una colección muy profesional, con mucha frescura en las blusas de jersey y los estampados floreados logrando transmitir sensualidad sin perder lo chic. También en la era del logo, Jarrar modernizó el de los años 20 utilizándolo en accesorios de la marca.
Con muchas ansias me gustaría ver qué depara a Lanvin para septiembre, ya que Jarrar empezó con muy buen pie y sostengo que, como mujer, genera cierta gracia ver el excelente trabajo que se está haciendo.
Fotos: Vogue
