Tras dos años, el pamplonés regresaba ayer con una propuesta meditada, consciente y alejada de la estacionalidad. Hablamos con él de esta nueva fase.
Manual de la 230 es el título de la propuesta que Mikel Colás presentó ayer en la jornada de #SamsungEgo19 y como participante del certamen Mercedes-Benz Fashion Talent. Dos años de retiro le han hecho reconectar consigo mismo y expresarlo en una propuesta donde las sargas de algodón, el tencel y la viscosa son sus grandes aliados para crear unas prendas que huyen de la estacionalidad apostando así por un concepto más sostenible. Patrones amplios, sencillos y apto para todos los públicos son la clave en esta colección que ha convertido al azul marino en el color protagonista, acompañado por tonos más naturales, beige y algún toque de lavanda.
Tres años sin desfilar ¿vuelven los nervios de la primera vez?
Cuando me dijeron que volvería a desfilar pensé que ya no tendría nervios, pero ha sido como el primer día.
¿Qué has hecho esta etapa fuera de las pasarelas?
Me apetecía centrarme en el producto y veía que no encajaba en desfile. Me fui a meditar una temporada, recupere la ilusión y decidí volver.
¿Ha existido un proceso de maduración de la marca tras este tiempo más alejado de los desfiles ?
Sí, el proyecto ha ido madurando. Ahora es un proyecto menos ambicioso, más pequeño y más romántico. La sostenibilidad es uno de ejes principales. Prefiero llegar a menos gente, pero de calidad.
Al ser una marca homónima, ¿ligas tu apariencia por completo a la imagen de la marca?
Sí, seguramente sí. Me siento bastante identificado con la mayoría de looks.
Crear una marca personal es un proyecto arriesgado, ¿qué libertades te aporta trabajar por cuenta propia?
A nivel creativo tienes el terreno libre para crear y escoger lo que te gusta. Te sientes libre, pero a la vez surgen muchas inseguridades que te hacen dudar y dudar.
¿Qué te ha inspirado para esta nueva propuesta de colección?
Me retiré un tiempo a pensar en lo que quería hacer. La colección surgió de una manera improvisada. En este tiempo escogí tejidos, volúmenes que me interesaban, desarrollé patrones. Tiene mucho de orgánico, de naturaleza urbana.
Has convertido el popelín de algodón en tu seña de identidad ¿por qué este tejido y no otro?
Comencé haciendo camisas y ropa interior con este tejido. Me siento cómodo con el. Es fácil de trabajar, agradable y con infinidad de posibilidades.
¿Te planteas experimentar con otro tipo de tejidos en próximas colecciones?
Sí, ahora estoy interesado en todo lo relacionado con los tejidos sostenibles.
¿Cuál es la razón de tu apuesta directa por la atemporalidad y diseños sin género?
Desde el primer momento tuve claro que no trabajaría las temporadas. Es una colección con tejidos más ligeros y gruesos. Una gabardina ligera puede ser muy útil en primavera, pero también en un invierno en el Mediterráneo. A la hora de diseñar no pienso si la prenda la llevará una mujer o un hombre. Al ser siluetas holgadas encajan bien a casi cualquier persona.
Fotografías de Xavi Prat para #VEINDIGITAL
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