8 consejos para evitar el estrés en las rutinas matutinas escolares

17 / 09 / 2018
POR Julia Olmo

Llegar a tiempo al colegio puede parecer misión imposible con los pequeños de la casa, pero estás de enhorabuena. Sigue estos consejos para cumplir los horarios sin prisa.

 

 
Seamos sinceros, ¿llegamos al colegio a tiempo? Siempre hay algún niño que llega corriendo, despeinado, con los ojos todavía cerrados o tomándose el batido. Si ese pequeño es nuestro hijo, podemos conseguir que no nos pase más y llegar siempre puntuales, un aspecto fundamental para que aprenda a serlo y que le será de gran ayuda para cumplir las normas cuando sea mayor. ¿Cómo? Muy fácil, siguiendo estas pautas.

  1. Preparar las cosas la noche anterior. Cuantas más cosas hagamos por la noche, menos tendremos que hacer por la mañana. El almuerzo podemos dejarlo preparado la noche anterior incluso con la ayuda de nuestros hijos. Que sean ellos quienes se preparen la mochila con la comida les dará independencia y se sentirán más responsables, siempre claro, bajo nuestra supervisión para que los alimentos sean los adecuados. Podemos preparar una lista con los almuerzos para toda la semana y así ellos sabrán que incluir. La ropa también debemos dejarla lista, incluso para toda la semana, así nada más levantarse sabrán qué ponerse.

 

  1. Dormir lo suficiente. Si los pequeños descansan bien, por las mañanas todo será más fácil. Para que su descanso sea completo deben dormir ciertas horas según su edad. Cumplir con las horas de sueño es más fácil fijando los mismos horarios para todos los días, tanto para levantarse, como para acostarse. Además, un aspecto que nos ayudará, será apagar las pantallas al menos, una hora antes de la hora fijada. En ese periodo de tiempo, lo mejor es jugar en familia o leer.

 

  1. Tener fijado lo que deben hacer cada mañana. Los niños deben tener claro qué tienen que hacer al levantarse. Lo mejor para ello es planificar el tiempo previo a ir al cole en calendarios que podemos hacer con su ayuda y pegarlos en sus habitaciones.

 

  1. Crear horarios. El calendario de lo que deben hacer cada mañana, puede estar acompañado de un horario que fije el tiempo que tienen para cada cosa y les enseñe a ser más organizados.

 

  1. Diversión. Las mañanas pueden resultar aburridas, sobre todo si nos preparamos para ir al colegio. Una buena forma de amenizarlas es con música. Podemos preparar una lista de reproducción en la que cada canción sirva para una actividad distinta.

 

  1. Ser positivos. La positividad es nuestro mejor aliado. En ocasiones, los niños tienen miedo a enfrentarse al día, la mejor manera es repetir frases positivas y motivadoras para nuestros pequeños, “hoy vas a tener un gran día”; “vas a ver a tus amigos y te lo vas a pasar muy bien”; “eres capaz de hacer todo”, etc.

 

  1. Crear un espacio en el que estén todas las cosas que utilizamos por las mañanas. Este espacio nos será muy útil para dejar todos los objetos que nos ayuden a prepararnos por las mañanas o guardar aquellos que utilicemos a menudo.

 

  1. Las recompensas son muy efectivas. Si nuestros hijos cumplen los horarios podemos recompensarles para que sigan haciéndolo. Una buena forma, lejos de comprarles algo material, sería llevarles de excursión o ver una película toda la familia perimitiéndoles que se duerman más tarde, en fin de semana.