Comienza un mes propicio para reforzar lazos familiares. Si en los últimos tiempos has sido una mala hija, es el momento de enmendar tus errores. ¿Te portaste mal cuando la abuela sacó las gafas de cerca y te pidió que la ayudaras a configurar el móvil? ¿Silenciaste el grupo de whatsapp de tus hermanos y sus parejas porque estabas harto de chistes malos de política y fotos de descomunales miembros viriles? Pues es hora de hacer una reentré. Te echan de menos. Te necesitan muchísimo, sobre todo la yaya. Y tu tía, tu tía también. Hasta tus primos, que vaya si los tienes abandonados a los pobrecicos, como ya no hay casi bodas (gracias, progreso) no hay quien te vea el pelo si no es con cita previa. No te hagas la remolona y vuelca todo tu amor en la familia. Aunque tu familia sean 6 gatos y una suculenta. Riégala… O no… no la riegues, claro. Como dijo un hombre muy sabio y mejor pisicis: shower the people you love with love.
Tauro: Aunque para muchas personas es lo deseable, no todo el mundo tiene la suerte de que esa persona con la que te lías por despecho, tras una ruptura de una relación larga que creías que iba a ser para siempre, se convierta en el nuevo amor de tu vida. Te encuentras con ganas y estás en condiciones de amar tan fuerte como Cristina Pedroche, pero no es probable que durante este mes de abril vayas a encontrar a tu chef punki de palo particular. Lo que no quita que emplees todas tus energías en hacerse sentir super especial a cada personascon la que te veas envuelta. Que no vayan a quedarse en tu vida no quiere decir que no merezcan tu cariño y dedicación. Así que mira: está en tu mano convertir un mes “malo” en el amor en uno muy bueno, del que sacar experiencias positivas y tener un impacto guay en quien tenga la suerte de cruzarse en tu camino.
Géminis: En aguas turbulentas os tocará nadar, queridas gemeliers, durante lo que viene siendo este mes de abril. A pesar de no ser un signo que busque especialmente la tranquilidad y la satisfacción de una rutina bien llevada (¿os digo lo mismo cada mes o me da a mi la impresión?), ¿a quién no le gusta cierta seguridad de vez en cuando? En las próximas semanas estarás alterada debido a circunstancias excepcionales que, afortunadamente, serán también excepcionalmente pasajeras. Trata de llevarlas con dignidad y no dar la tabarra a la peña con lo agobiada que estás. Procura, además, no cargarte pesos a la espalda que no sean imprescindibles. Necesitarás plena concentración para sobrellevar los cambios, así que si te obsesionan otros temas, como algún síntoma médico o un pavo que no devuelve los whatsapps, no lo dejes pasar y míratelo para quedarte relajada y con la cabeza despejada.
Cáncer: Curvas ahead. Tenemos dos problemas, querida amiga cangreja: por un lado tu cerebro, que está en ebullición con todo tipo de pensamientos negativos achacables a las lunas llenas, los equinoccios y quizás un colchón que sería hora de ir pensando en cambiar. Por otro, la boquita, que será el vehículo perfecto para esas ideas chungas que te bombardean día y noche. Esta excelente combinación dará como resultado una persona insoportable con la que nadie se querrá sentar en el recreo, y a la que nadie querrá contarle sus movidas, porque tiras por tierra los sueños y anhelos de la gente y básicamente estarás hecha un culo de persona. Si lo que te apetece son unas semanas de ermitaño, fetén. Pero si aún quieres seguir viviendo en sociedad, piensa dos veces antes de opinar sobre el nuevo novio de tu amiga o la absurdísima idea de negocio que ha tenido tu cuñada. Sabemos que es absurda. No hace falta que lo señales en voz alta.
Leo: ¿Hace cuanto no te paras a pensar en si les estás dedicando suficiente tiempo a tus amigos? Tienes la fea costumbre de darlos por garantizados, pero nunca sabes cuando será demasiado tarde para recuperarlos, después de meses de negligencias amiguiles. No es que no tengas derecho a tomarte unas pequeñas vacaciones sociales. Todas las necesitamos, sobre todo esos extraños especímenes de leo introvertidos (que los hay, ojo). Pero una cosa es necesitar tiempo a solas y otra pasarse el resto de la vida de una forever alone. Y como no quieres esto último, mi consejo es que te marques una tarde en la agenda para dedicarla únicamente a mandar cariñosos mensajes a amistades y familiares. Y no me seas tan cutre como para usar una plantilla en la que solo cambias el nombre. No lo diría si no te creyera capaz. Te lo creo. Mazo.
Virgo: Contradicciones, paradojas y disonancias cognitivas irrumpen en la senda vital de mis queridas virgos en el mes en el que todas nos volvemos locas por el jet-lag del cambio de hora, los constipados por pasarnos a la chaqueta de entretiempo antes de lo debido y los pintalabios de color coral (que a mi juicio deberían reservarse únicamente a las personas de complexión cálida y suave, pero, yo estoy aquí para los horóscopos y no para dar consejos de estilo, así que me callo. Pero quiero dejar constancia de que parece absurdo tener que guardar los pintalabios oscuros hasta el otoño, con lo que molan). El caso es que el cuerpo te pedirá seguridad, pero el alma anhelará jarana. Lo que se podría solucionar opositando al Ministerio del Tiempo: la tranquilidad de tener una plaza de funcionaria… que viaja en el tiempo y vive disparatadas aventuras. Sé que firmabas ya si pudieras. No digamos si en el pack se incluye estar igual de potente que Cayetana Guillén Cuervo. Pero como el Ministerio del Tiempo no existe… Pues tendrás que encontrar otra solución tú sola, no te lo voy a dar yo todo mascado como si fuera Elena Francis.
Libra: Aunque ahora parece estar a años luz, el momento en el que recuperarás la salud y la dermis de la nariz, despellejada y encarnada tras un prolongado uso de pañuelos de papel (ni los de loción de aloe vera nos salvarán: cuando el constipado aprieta, las narices se convierten en prisioneras de los Bolton de Fuerte Terror) llegará. Yo te prometo, amiga balancita, que si te haces muchos smoothies (tip: cuanto más a rayos sepan más efecto hacen), muchos tés con jengibre, si te abrigas bien la garganta, si en vez de salir con el pelo mojado (porque ya han cambiado la hora y te crees que estamos en agosto) te lo secas bien, si te arropas con una señora manta como toca cuando aún hace frío, si cumples todo esto te juro que estarás fresca y sana como una lechuga justo a tiempo para el estreno de la nueva temporada de Juego de Tronos. Diosa bendiga a abril, mes de las flores y del estreno de las nuevas temporadas de esas series que hacen que vivir merezca la pena.
Escorpio: Pegarle el sablazo a la familia es una cosa que nos toca hacer a todas tarde o temprano. Algunas de hecho lo hemos convertido con gracia en nuestra forma de vida (por causas de fuerza mayor, ojo, a nadie le gusta ser dependiente. A no ser que se trate de buscarse un sugar daddy que esté muy bueno y sea encantador, aunque suene quizás un poco antifeminista… Yo qué sé, a veces estoy planchando en bata y pinza de pelo y le pido perdón a la Friedan por tener estos deseos tan patriarcales). Ahora igual te toca a ti pedir prestado porque no te da. Y si no te da, pues no te da. Ya vendrán tiempos mejores, oiga. Ten siempre presente que todo el mundo pega sablazos. Algunos incluso tienen la jeta de llamarlo “boda”. No tengas vergüenza, esos amigos que pusieron el número de cuenta en negrita y subrayado en la invitación no la tuvieron.
Sagitario: Aunque la primavera sea una época que ni fu ni fa, es alegre y eso, pero tampoco tenías nada en contra del invierno, no te sientas presionada a estar super happy de que haya llegado el buen tiempo. Si lo piensas bien, desde la ventana de la oficina (si es que tienes una ventana a mano) da un poco igual ver a niños jugando alrededor de una boca de riego desatada o la suprema oscuridad. No es que puedas levantarte y unirte a la fiesta… Así que 0 grados: el cambio de temporada no te va a provocar ni frío ni calor. Igual te cabrea un poco ver que todos los escaparates han sido invadidos por una absurda fiebre por la estética wicca. Y si no quieres que te suba la fiebre, procura no enterarte de que se han puesto de moda los vaqueros “desflecados”. No, insensata, ¡no busques en qué consiste!
Capricornio: Tienes muchos motivos para estar turbada. Llevas tiempo sintiéndolo en los huesos, sabes que algo va regular, te sientes un poco inquieta, como si esperases más de la vida de lo que esta, la muy asquerosa, se está dignando a ofrecerte. Y tienes todo el derecho a esperar. Aunque ya hemos dicho en varias ocasiones que no existe tal cosa como la justicia retributiva, en la que te portas guay y el universo te recompensa, en tu caso, la verdad es que debería existir. Si alguien merece ser bien tratada por el cosmos y sus insondables mecanismos, son las nativas de este signo trabajador y motor del mundo. En asuntos laborales estás estancadilla, y eso afectará por desgracia a tu vida emocional, porque te cuesta mucho separar ambos aspectos. Así que mi consejo es que trabajes más en el plano personal, y ello acabará por impactar en el trabajo y los asuntos monetarios. Tu puedes, primor.
Acuario: Si llevas un tiempo planteandote esa posibilidad, es probable que haya llegado el momento de hacerlo realidad. Se presentan unos días muy buenos para dar rienda suelta a esas fantasías (elaboradas, ojo, no una ocurrencia que acabas de tener) sobre volver a estudiar, irte a vivir a Escocia (repito, porque lleva siendo tu país favorito toda la vida, no porque ayer empezaste a ver Outlander), montar un pequeño negocio (del que ya tienes el plan hecho y todo pensado y repensado, repito, ideas que llevan un tiempo en tu cabeza, y no la ultimante acuariada a la que nos tienes acostumbradas). Así que si te sale mal la cosa, no dispares a la pianista astróloga, que soy yo, jugando con vuestros destinos como una master de las marionetas. Es sólo que se trataba de otra de tus disparatadas ocurrencias en lugar de una empresa viable y con futuro. Fustigamientos cero.
Piscis: Todos nos merecemos unas vacaciones de vez en cuando, incluso esas personas sin las cuales parece que todo va a desmoronarse de un momento a otro. Corren malos tiempos para mantener la cabeza fría. Y lo de intentar poner distancia para seguir funcionando con normalidad cuando alrededor reina el caos, en ocasiones no es suficiente. La realidad te supera. Nos pasa a muchas. Normalmente sabes llevarlo con gracia, y aunque no te resbale, sabes seguir funcionando. Sin embargo te encuentras en un momento en el que te conviene alejarte un poco de las redes sociales, de los medios de comunicación y de ese pozo de amarguras que es twitter. No pasa nada por dejar de ver el telediario un tiempo, o por dejar de leer el periódico. No eres peor persona: necesitas unas pequeñas vacaciones porque estás colapsada. Solo eso.
