‘I Hair You’ de Julia Sobrón: visibilizar el vello corporal para deconstruir los prejuicios

30 / 11 / 2020
POR David Alarcón

La propuesta reivindicativa explora las connotaciones negativas–asociadas principalmente al pelo femenino- en favor de su aceptación definitiva.

Julia Sobrón – ‘I Hair You’

“No estoy pidiendo que nadie deje de depilarse. Estoy pidiendo que hagan “whatever the hair they want”. Julia Sobrón no pretende imponer ni concluir qué es lo correcto. Su proyecto ‘I Hair You’, presentado como parte de una propuesta promovida desde el IED Barcelona, explora el cuerpo humano en busca de la normalización del vello corporal.  Una normalización que aboga por la libertad de elección, la aceptación del ser y la visibilidad de una belleza natural y diversa. “Que se depilen si les apetece o que se hagan trenzas en los sobacos si les llega, pero que lo hagan por decisión propia” añade la joven creadora, en pro de la autodeterminación.

Inquieta por naturaleza, Sobrón se puso manos a la obra después de que Borja Martínez (Lo Siento Studio) les invitase -a ella y a sus compañeros en el Titulo Superior en Diseño Gráfico– a emprender un proyecto desde cero con el que reivindicar un tema recurrente en sus vidas. “Ya desde hacía tiempo me gustaba jugar con el cuerpo humano y provocar con ello al espectador. Empecé a coleccionar pelo en el instituto y sigo haciéndolo desde entonces.” confiesa la fotógrafa, quien explora a su vez el diseño gráfico, la ilustración, la interpretación o la danza. “Estar detrás de la cámara me encanta, pero estar delante lo disfruto aún más”.

En cuanto al origen del rechazo hacia el vello corporal, aún generalizado pese al surgimiento de múltiples movimientos que exigen su completa normalización, la creadora multidisciplinar cree necesario acudir a la construcción social promovida por los medios de difusión. “Hay una sobredosis de imágenes afectando y deformando la percepción de la gente desde pequeños. Se relaciona el vello con suciedad, cuando en realidad habría que hablar de higiene” explica, refiriéndose a la imagen distorsionada del pelo promovida por la publicidad. Proyecciones cargadas de connotaciones negativas que afectan principalmente al cuerpo femenino. La propuesta, surgida desde la ironía y recogida en un álbum,  plantea una pregunta final al espectador: “¿Es tu propia elección, o la presión social la que te bloquea a la hora de expresarte?”

Hablamos con Julia Sobrón para dar respuesta al interrogante y conocer sus impresiones al respecto:

Son muchas las disciplinas artísticas en las que te desenvuelves. ¿Quién es Julia Sobrón?

Wow, empiezas con la que creo que es la pregunta más complicada que me puedes hacer… Julia Sobrón es un culo inquieto incapaz de elegir. Estoy bastante convencida de que es ese caos en mi cabeza el que me ha convertido en una persona insaciable, siempre buscando experimentar cualquier disciplina artística con la que sienta que puedo expresarme. Mencionas fotografía, diseño gráfico e ilustración, pero hoy en día no me entiendo sin interpretación y danza. Estar detrás de la cámara me encanta, pero estar delante lo disfruto aún más.

‘I Hair You’ es tu último proyecto. Una obra en la que conviertes al vello corporal en el protagonista por excelencia. ¿Qué quieres comunicar?

Tratar el vello como la cosa normal que es ayuda a deconstruir los prejuicios que lo rodean. No estoy pidiendo que nadie deje de depilarse. estoy pidiendo que hagan “whatever the hair they want”. Es decir, hacer lo que quieran de verdad, lo que harían si no hubiera factores externos que les afectaran. Que se depilen si les apetece o que se hagan trenzas en los sobacos si les llega, pero que lo hagan por decisión propia. Cuanto más normal tratas algo, más normal se convierte para la gente que te rodea. Y ese círculo se va expandiendo exponencialmente.

¿Cuándo y de qué forma decidiste emprender esta propuesta?

Todo comenzó como un proyecto de clase en IED Barcelona, donde Borja Martínez de Lo Siento Studio nos propuso crear un proyecto en el que reivindicar un tema que fuera recurrente en nuestra vida. Ya desde hacía tiempo me gustaba jugar con el cuerpo humano y provocar con ello al espectador. Empecé a coleccionar pelo en el instituto y sigo haciéndolo desde entonces. Siempre me ha parecido curioso que, la primera vez que lo menciono, la gente pone cara de “ugh”. Pero con el tiempo,  le pierden el asco al pelo. Me piden ver el álbum, tocarlo… Eso me dio que pensar si, con todo el revuelo que da el vello -especialmente el femenino- podíamos crear esta misma curva de aceptación, llevando el vello corporal a lo extremo.

La exploración con el cuerpo humano es un tema recurrente en mi trabajo, descontextualizarlo hasta conseguir imágenes que pueden llegar a considerarse incómodas a la vez que atractivas por la conexión obvia que todo el mundo encuentra en ellas. Creí que era un buen momento para llevar un proyecto de diseño gráfico por un camino mucho más físico.

¿Por qué crees que el pelo incomoda a gran parte de la sociedad, llegando incluso a producir rechazo?

Mucha gente no está acostumbrada a ver pelo donde naturalmente hay pelo, especialmente si hablamos del cuerpo en femenino. La depilación está tan generalizada que ni siquiera en los anuncios de depilación hay vello que depilar. Hay una sobredosis de imágenes afectando y deformando la percepción de la gente desde pequeños. Se relaciona el vello con suciedad, cuando en realidad habría que hablar de higiene. Por suerte, en estos últimos años, está habiendo mucho más movimiento de la aceptación del pelo en todas sus formas, pero hay que seguir visibilizándolo para que se llegue a su normalización total.

Háblanos del proceso creativo de ‘I Hair You’. ¿Tenías claro cómo querías enfocarlo? ¿Has contado con algún tipo de ayuda externa?

El proyecto, por briefing, tenía que ser reivindicativo. Al querer tratar un tema que a mucha gente le puede llegar a provocar rechazo, consideré que un tono irónico podría ayudar a que llegara mejor a la gente, y la exageración haría aún más obvio lo estúpido de algunas situaciones. De ahí el impacto visual que generan las imágenes del proyecto. En cuanto a ayuda, tengo la suerte de estar rodeada de gente que cree en mis ideas incluso cuando yo dudo de ellas. Me dejan cortarles el pelo para usar como material de producción, hacer virguerías depilándoles las piernas… Bueno, y sin duda alguna, Borja Martínez, que desde un primer momento vio potencial en este proyecto.

“¿Es tu propia elección, o la presión social la que te bloquea a la hora de expresarte?” preguntas en el manifiesto. ¿Has sacado alguna conclusión en claro después de haber realizado el proyecto?

Es duro darse cuenta de que la relación de la gente con su vello ello está más influenciada por factores externos que por lo que de verdad piensan ellos individualmente. Tratar el vello como la cosa normal que es ayuda a deconstruir los prejuicios que le rodean. No darle importancia hace que la gente acabe por aceptar el vello corporal tal y como lo que es: algo que forma parte de ti.

Si quieres dejarlo crecer, bien. Si quieres cortarlo, bien. Si quieres peinarlo, bien. Pero hazlo por decisión propia.