Alabama y Lila llegaron cargadas de magia, amor e inspiración. Para María Escoté ser madre ha creado una revolución positiva en su pequeño cosmos y ha supuesto el inicio de nuevas y excitantes aventuras. La línea infantil María Kids, que surgió después del nacimiento de su primera hija, es una de ellas. Diseñadora, empresaria y madre, la ecuación parece complicada, pero María lo vive desde la absoluta felicidad.
¿Hay diferencias entre la María Escoté diseñadora y la María Escoté mamá?
En mi trabajo soy más exigente y dura que en mi faceta como madre, que es todo lo contrario. En ella simplemente me detengo, observo y disfruto.
Dicen que la maternidad puede ser muy inspiradora. ¿Para ti lo ha sido?
Sin duda alguna la maternidad me parece la situación mas inspiradora por la que he pasado nunca. Cuando Alabama nació descubrí un mundo que hasta entonces no conocía. Su imaginario inocente, ingenioso y lleno de creatividad es una gran fuente de ideas.
De hecho, a raíz de ser madre has introducido una línea de ropa infantil, ¿no?
Cuando nació Alabama me di cuenta de que había un vacío en moda infantil. Es verdad que hay marcas de ropa para niños muy molonas, pero son minoría. Fue ahí cuando creímos que podíamos tener un hueco en este mercado y surgió María Kids, pensada para esas madres que buscan algo especial para sus hijos y no lo encuentran. El único mensaje que queremos transmitir es el de una vida llena de color y fantasía abierta a la creatividad. Estamos muy contentos con esta línea, acabamos de hacer el primer desfile de María Kids en China y creemos que va a ser un éxito.
Alabama imagino que ya escogerá su ropa… ¿Cuál es su vestido favorito? ¿Os ponéis siempre de acuerdo?
Para Alabama la hora de vestirse es una fiesta y un juego. Desde muy pequeña es algo con lo que se divierte muchísimo. Casi siempre dejo que escoja su look, me parece algo formidable que desde tan pequeña use la moda como forma de expresión. Su conjunto favorito cambia cada semana, pero seguramente si le preguntases cuál es su favorito ahora, te dirá que su nuevo vestido de Frozen. Con ella he aprendido que una puede ir vestida de reina del hielo tanto a hacer un picnic al parque como de urgencias al médico.
¿Cómo llevaste el embarazo de la primera? ¿Y el de la segunda?
He sido muy afortunada en mis dos embarazos. El primer embarazo se vive de una forma única, es la primera vez y tienes todo el tiempo del mundo para ti; el segundo se vive de forma diferente ya que a la vez cuidas a un bebé y no tienes tanto tiempo para disfrutarlo. Los dos embarazos han sido para mí unas de las mejores épocas de mi vida. No sé si por el tema hormonal o por el emocional, pero tanto física como mentalmente he disfrutado mucho de ese periodo y me ha hecho sentirme muy bien. De hecho, a nivel creativo considero que mis mejores colecciones las he hecho embarazada. Y la relación con mi pareja se convirtió en algo mágico durante esos meses.
¿Te cuidaste de alguna forma especial?
Creo que es fundamental, si puedes, hacer ejercicio cuerpo-mente durante los nueve meses. Yo practiqué Bikram yoga durante todo el embarazo y gracias a ello estuve muy ágil hasta el final. Eso y no dejar de trabajar convirtieron ese periodo en uno de mis favoritos.
Y si fueras tú la que tuviera que dar algún consejo, ¿cuál sería?
Disfruta de cada segundo. Porque es algo mágico e irrepetible y sobre todo hazlo a tu manera, disfruta de tus bebés como sientas y quieras.
Alabama y Lila son dos nombres muy especiales. ¿Cómo disteis con ellos?
Con catorce o quince años vi la película True Romance, con Patricia Arquette; recuerdo que provocó una explosión en mí, hasta entonces no había visto una mujer igual: ella encarnaba todo lo que yo quería ser. Me sedujo de tal forma que en aquel momento, siendo una niña, decidí que si algún día tenía una hija se llamaría Alabama. Cuando conocí a Iván en Londres a través de una red social en la que mi nick name era Alabama ya no había duda alguna de que nuestra hija se iba a llamar así. Hace unos años oí el nombre de Lila por primera vez, me pareció uno de los nombres más bonitos que había escuchado nunca, lo guardé y supe que también iba a ser para mí. En esta ocasión, tuve que convencer algo más a Iván porque habían otros nombres rondando, pero finalmente mi chico también se enamoró de Lila y, creedme, no podríamos haber escogido mejor nombre para ella.
Los dos trabajáis, ¿cómo lleváis el tema de la conciliación? ¿Cómo os organizáis?
Hay que estar muy organizados. Lo llevamos bastante bien, tenemos ayuda y eso nos facilita podernos organizar mejor.
En un trabajo como el tuyo no será fácil separar lo familiar de lo profesional. ¿Cómo lo consigues?
No lo consigo del todo, mi trabajo forma parte de mi vida y cuesta mucho separarlo. Intento no influenciar a mis hijas con mi trabajo para que tengan un espíritu libre y absorban muchas otras cosas, pero inevitablemente mi trabajo es algo muy personal y en casa todos están impregnados de ello.
Imagino que ahora estarás preparando los últimos retoques de la nueva colección de verano. ¿Nos puedes contar cómo nos quiere vestir María Escoté la próxima primavera?
Es una colección distinta a lo que os tengo acostumbrados. Este año ha sido muy importante para la marca ya que hemos abierto treinta puntos de venta en China. Ha sido un proceso largo y con muchos viajes a distintas ciudades de ese país. Ha sido inevitable que su estética y color influenciara esta colección y la llenara con sus estampados, pero también encontraréis lisos, prendas oversize de corte denim y la mínima expresión del vestido veraniego en sedas con motivos orientales.
¿Te gustaría que tus hijas se dedicaran a la moda como tú?
Quiero que mis hijas se dediquen a lo que ellas les guste, les haga felices y realmente les apasione, como me enseñaron a mí.
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