El diseñador cordobés presenta su nueva colección Otoño/Invierno 2023 en la Semana de la Moda de Nueva York. Un paseo por sus recuerdos, que mostrarán su visión más introspectiva y queer.
La nueva propuesta de Palomo Spain ‘The Closet’ (‘El Armario’ en inglés) hace referencia a ese primer contacto que tuvo el artista con la moda. Ya desde muy pequeño, Palomo desarrolló esa sensibilidad privilegiada indagando por los armarios de su madre, experiencia estética que definirá su visión para el futuro de la moda masculina.
Aún sin saberlo, el diseñador experimentó en su edad más temprana con las barreras de la convencionalidad de género, jugando con toallas, o cualquier otro elemento que tuviese a su alcance como pañuelos de seda, edredones o mantas, para terminar construyendo una imagen de sí mismo que coquetea con lo queer.
La paleta de colores vivos del autor traslada al espectador a un ‘Alicia en el País de las Maravillas’ gay, con drapeados y largos vestidos que combinan con con finas camisetas de mesh, blusas con print florales, bufandas con reminiscencias rústicas y minifaldas de pelo (artificial) provocando un alargamiento de la figura del modelo que responde al soplo más fashionista de la propuesta del diseñador.
Cristales Swarovski salpicados por toda su colección, voluminosas prendas que aparecen como abrigos en forma de cocoons hechos de edredones, se entremezclan con piezas más sencillas que corresponde al estilo más street de la firma de moda. Se recuperan las formas más características de la firma con nuevas cromáticas, como es el caso del bolso maletín ‘Castellana’ que combina, a su vez, con una serie de zapatos de tacón en versión mocasín, botín y bota.
En toda su obra, cobra un papel esencial la estética del maquillaje y peinado, de la mano de profesionales como el equipo de Marcelo Gutierrez para M.A.C Cosmetics o Sebastian Professional con Shay Dempsey y Anthony Cole a la cabeza para hair-styling. Una estética naive de suaves y alegres tonos que busca esa candidez e ingenuidad, y que se ve intensificada con los looks despeinados de un adolescente recién levantado.
Finalizando con el hilo conductor de la historia, basado en los recuerdos de la infancia y la diversión sin género, Ruslan Baginskiy, propone unos tocados que se apropian de materiales o formas que nos rodean, como un almohada colocada alrededor de tu cabeza o hacer de una toalla una capa.
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