“La mujer fatal no se doblega ante la autoridad divina o patriarcal. Ella es, en realidad, el reflejo de los miedos masculinos de cada era”, Elena Gallén.
La escritora y directora de cine Elena Gallén y la ilustradora Sara Herranz presentan ‘El diablo es una mujer’ (Lunwerg) un ensayo ilustrado sobre teoría del cine que redescubre el mito de la mujer fatal desde una perspectiva feminista.
Sin duda uno de los arquetipos más interesantes del relato cinematográfico e histórico es el de la mujer fatal. De la mano de las misteriosas y oscuras ilustraciones de Sara Herranz, Elena Gallén realiza un recorrido por la figura de la femme fatale desde su génesis hasta el presente en su propia experiencia.
Eva y Lilith
Under The Skin
Recuperando la historia pagana y los mitos fundacionales, ‘El diablo es una mujer’ nos descubre la existencia de Lilith, la primera mujer antes que Eva, o la de Salomé. Pasando por las vampiresas del cine mudo de los años 20 o las misteriosas mujeres del cine noir de los años 30, hasta las icónicas femme fatale de la época dorada de Hollywood, Marlene Dietrich o Greta Garbo… Desde el Hollywood clásico hasta la mujer fatal de los 90, Sharon Stone de ‘Instinto básico’ o Charlotte Gainsbourg de ‘Anticristo’.
Una figura destinada a demonizar los comportamientos femeninos que se alejaban de los cánones tradicionales asociados a la mujer; a la maternidad, el matrimonio… Mujeres diabólicas que no se someten a la autoridad, que no se doblegan ante el patriarcado.
“Todos contamos las historias de otros para hablar de nosotros mismos. Yo me cuelo a través de los personajes mitológicos y cinematográficos conforme el libro evoluciona y acabo convertida en uno. Esas mujeres moran en mí, estamos todas unas dentro de otras, ¿cuántas mujeres me cabrán dentro?” – Elena Gallén
Mata Hari
Salomé
Phyllis Dietrichson
‘El diablo es una mujer’ supone una reescritura de una figura que ha sido creada desde una mirada tan masculinizada que ha perdido su sentido original: la mujer que conquista su libertad. El libro incide en la necesidad de reapropiarnos de nuestra narrativa y contar nuestras propias historias. El cine y la literatura como constructores de realidad han funcionado como un reflejo de los miedos masculinos de cada época y de cómo se nos percibe en cada momento, la femme fatale es un «espejo de los miedos masculinos de cada era».
“El machismo es una forma de memoria histórica. Negar el trato que durante siglos se ha dado a la mujer, el estado de opresión, discriminación y violencia ejercida contra nosotras no puede esconderse ni borrarse”. – Elena Gallén
Carmilla y Laura
Louise Brooks
Las autoras tenían como objetivo redimir este arquetipo que reivindica su libertad. Deconstruir a la mujer fatal e identificarnos con ella como una forma de acabar con la demonización que durante años se ha hecho del poder o la libertad femenina, y reconfigurar a la femme fatale desde una perspectiva feminista.
Mujeres que contra todo pronóstico se convirtieron en verdaderas fuentes de inspiración y empoderamiento. Mujeres inteligentes, decididas, valientes y libres.
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