Hablamos con Suzzan Atala, directora creativa de Tuza Store

05 / 01 / 2020
POR Ángela B. Suárez

 

Tuza store es uno de esos espacios clave en CDMX que no puedes pasar por alto en absoluto. La tienda está concebida para adentrarte en un mundo de fantasía, donde te puedes perder y descubrir diseñadores de moda, accesorios, joyería, objetos de decoración y desde la apertura de su nuevo espacio en la calle Colima 124, en la planta alta puedes hacerte manicura, tattoos y piercings. Hoy Tuza cumple su tercer aniversario. Suzzan Atala su creadora y directora creativa, comenzó esta aventura cómo diseñadora de joyas y su camino ha evolucionado hasta crear un espacio que acoge a toda una comunidad, que aboga por la creación de empleo justo y sin discriminación, y apoya a la igualdad de género, todo esto sin perder ni una pizca de diversión y vanguardia.

 

Suzzan nos abre las puertas de su apartamento en Ciudad de México para contarnos sobre cómo evolucionar tus ideas y cómo crear negocios viables, innovadores y que impulsen a toda una comunidad. Suzzan, me interesa mucho saber sobre cómo empezaste. Cuéntame sobre tus primeros empleos, que experiencias te marcaron, te fortalecieron y te prepararon para enfrentar tu futuro como empresaria. ¿Alguna persona en concreto o lugar que recuerdes en especial?

Me gradué en Londres, en Artes Técnicas y Escultura en Wimbledon School of Art, y cuando terminé, trabajaba medio tiempo en una fundidora de bronce, fue ahí que descubrí que me gustaba mucho trabajar con las manos, hacía aretes para mis amigas, probaba cosas… Un día me decidí a buscar un trabajo full time y entre en una joyería que estaba por Brick Lane, solo entré y pregunté si necesitaban a alguien y me dijeron que necesitaban una pulidora. Ahí empecé a conectar el mundo de la joyería con la escultura que había aprendido tanto en la escuela, como en la fundidora.

Más adelante comencé un internship en la joyería Laura Lee, en Covent Garden, a la par comencé a tomar un curso intensivo de joyería y también trabajaba los fines de semana en una zapatería. Fue una época muy dura, pero también muy gratificante a nivel aprendizaje, muy necesaria. Un día la dueña vino a la tienda y la encargada le habló de mí y ella me ofreció entrar full time en el departamento de diseño de la marca.

Estuve dos años trabajando allí, y fue en esa empresa donde aprendí los fundamentos de cómo imaginaba y quería que fuera mi empresa en un futuro. Éramos como una familia, nos cuidábamos y nos empujábamos a hacer cosas mejores, a ser mejores. Ella me apoyó a vencer mis miedos y sentirme más segura. Organizaba ventas con nuestras piezas, nos impulsaba como creadoras individuales… Ella fue mi mentora y esta experiencia una base crucial en mi confianza para proyectar mi propia empresa.

 

 

¿En qué momento sentiste que estabas preparada para crear tu propio negocio? ¿Cómo y cuándo diste ese paso? ¿Por qué comenzar en Nueva York? 

Después de cerrar esta experiencia en Londres, me mudé a NY y comencé a trabajar en otras marcas en las que también me di cuenta cómo no quería gestionar mi empresa… a veces la decepción o las malas experiencias también son un factor importante en el crecimiento y la determinación. Siempre tuve en mente montar mi propia empresa y todas esas experiencias tanto maravillosas como malas me ayudaron a forjarme.

En esta primera época en NY, mi tiempo libre lo dedicaba totalmente a hacer mis propias piezas, renté un estudio y fui desarrollando mi propio trabajo. Cuando armé mi primera colección y me sentí preparada, pedí apoyo a mi familia que se volcó conmigo y me ayudó a trabajar durante un año en el lanzamiento de mi propia marca. Me dediqué a hacer mi branding, pruebas de producción… Sentía que NY era la mejor escuela para estar preparada para todo. Si NY no te tumba, no te tumba nada. Dejé el trabajo que tenía y me lancé. Conforme iba estudiando más el mercado y las calidades, junto con las opciones más rentables a largo plazo, me fui dando cuenta de que la joyería en mi propio país era maravillosa, que los artesanos hacían excelente trabajo y me di cuenta que lo que quería era producir en mi país y apoyarlos como pudiera. Estuve tres años entre NY y Mexico, para finalmente ir formalizando mi headquarter en Mexico.

 

 

Me fascina cada vez que entro en Tuza, porque realmente has conseguido aunar el alma de los creadores mexicanos con una tendencia que se puede exportar al mundo entero y estar al nivel de otros diseñadores extranjeros. ¿Cómo te guías para seleccionar diseñadores? ¿Es algo intuitivo? ¿O es de una forma más analítica?

Inicialmente fui algo más intuitivo, de gusto propio. Pero con el tiempo y según la tienda fue madurando comencé a ser mas analítica y a trabajar apoyándome con mi equipo para vender diferentes rangos de precios, diferentes gustos y balancear los números sobre algo más profundo que mi propio gusto, algo más global. Aun así mantengo la base de que sean marcas independientes que tienen que darse a conocer, relucir y buscan apoyo.

 

 

Tuza comenzó como marca de joyas, pero pronto comenzaste a acoger a diseñadores mexicanos de ropa, a crear accesorios de moda y del hogar, y hace muy poco acabas de lanzar tu propia línea de textil. ¿Cómo y por qué nació la idea de esta colección? 

Siempre tuve la tendencia de complementar las joyas con mas accesorios, lo primero fueron los bolsos, y más adelante comencé a interesarme muchísimo por la ropa vintage también y por recrear ese estilo. Entró en el equipo Helene, que como diseñadora me ha ayudado muchísimo a aterrizar mis ideas. Hace muy poquito ya lanzamos nuestra segunda colección, Heaven o Las Vegas, que nació del dramatismo ochentero que me inspira muchísimo, de la música y los videos de la época y de la paleta de colores que utilizan… Aunando sentido del humor con lo sentimental. Primero diseño las joyas y de las joyas nacen la ropa y los accesorios.

 

 

Lo primero que me atrajo hacia ti fue tu capacidad de proyectar una comunicación divertida, lanzar productos modernos y frescos, a la vez que apoyas a los derechos de los trabajadores mexicanos, el diseño vanguardista de este país, a los procesos éticos y a la igualdad de género. Tuza es un negocio que pretende impulsar la economía de tu país de origen, cambiando estigmas de explotación que están muy arraigados en la cultura. ¿Puedes afirmar que un cambio es posible? ¿Cuál es tu opinión hacia las dinámicas de producción y trato de los trabajadores en México? Cuéntame sobre tu experiencia en este sentido ¿Qué tipo de retos has tenido que enfrentar? ¿Qué límites existen?

Es una pregunta complicada y delicada, mi marca no pretende ser una salvadora de la economía, pero creemos que el cambio está en uno mismo y la moda es una de las industrias que mas afecta al sistema ambiental y económico mundial. Y desde nuestra propia capacidad apoyamos las causas que nos mueven. Sea integración, derechos… Tratamos de ser coherentes con lo que hacemos, aunque a veces es muy difícil, es un proceso que solo es beneficioso para todos en un final. La mano de obra esta muy maltratada, y están acostumbrados a estructuras obsoletas… Hemos tenido que ganarnos su comunicación y su confianza. Y poco a poco ir abriendo su gama de opciones y de posibilidades en las que ambos estuviéramos cómodos. Por ejemplo, me gusta mucho poder ser efectivos con el tiempo, trabajar menos días a la semana, pero trabajar mejor. Ha sido ensayo y error hasta encontrar un balance con un sistema muy complejo e intrincado. A un joyero no se le paga menos por ser mano de obra, todos somos engranajes claves en la marca. Cada uno desde sus propias decisiones y humilde posición puede hacer por cambiar las cosas, porque todo evoluciona con el tiempo.

 

 

Ya para terminar enhorabuena por tu trabajo, por ser parte de un cambio necesario en nuestras dinámicas de consumo y por ser capaz de posicionar a Mexico y sus diseñadores donde se merecen. Por demostrar que lo superficial y banal esta pasado de moda y gracias a espacios como Tuza, crece la esperanza de que hay un lugar para todos, que un cambio es posible, lejos de la discriminación, de la explotación y del aburrimiento. ¿Cuál es tu visión hacia el futuro? ¿Qué ambiciones alberga Suzzan Atala? 

Me gustaría que poco a poco en un futuro, Tuza se moldee como una marca de moda más importante, más presente, para poder ser clave y tener un impacto más real en el sistema y poder ser parte de un cambio mas grande. Poco a poco y con apoyo de todos, influenciarnos para llegar a ese punto en el que tanto el cliente entienda que las cosas bien hechas y buenas para la sostenibilidad tienen un precio que no es de 10USD y un balance entre una empresa que funcione cree empleos y un modelo de negocio exitoso bajo esas bases. Es importante empezar desde Mexico, a poner los ojos en Mexico en lugar de poner los ojos hacia fuera. Me gustaría crecer con el apoyo de más diseñadores, hacer presentaciones más ambiciosas e incluso sueño en un futuro, con desarrollar una escuela de arte y diseño que no este reservada para las elites del país. Donde la creatividad sea una via de escape y de expresión para todos sin excepción.

Más en @tuzastoremexico y @tuzatuzatuza

 

Fotografías y entrevista de Ángela Suárez para #VEINMX