Sére Skuld: «el mundo onírico es una puerta a la experiencia visionaria»

09 / 02 / 2023
POR Diana García Kulikova

Bruja del caos, onironauta, artista, cantante, podcaster, música, artesana, escritora y performer. Hablamos con la autora de ‘Hildegard Von Bingen; Las estrellas extinguidas’ (Aurora ediciones), libro en el que entreteje la historia de la mística y visionaria medieval con sus propias experiencias personales.

Sére Skuld, una polifacética mujer que no nos deja indiferentes, no solo por la cantidad de trabajos que puede compaginar a la vez, sino también por su forma de llevar la magia a lo tangible: aquello que es difícil de expresar, ella tiene la capacidad para facilitar su comprensión. 

Ahora mismo dirige y presenta el podcast ‘Misterios y Cubatas’, es cocreadora de ‘Onironautas Podcast’ colabora en ‘La Escóbula de la Brújula’ y también ha colaborado en Movistar+ en el programa ‘Mi Año Favorito’ con Dani Rovira y Arturo González-Campos.

Sére forma parte de la Academia de las Artes Escénicas, ha actuado e intervenido en teatros y espacios culturales como el Centro de Artes Escénicas SAROBE (País Vasco), el Círculo de Bellas Artes (Madrid), IFEZA (Zamora) y el CCCB (Barcelona) entre otros.

También escribe en su Patreon  donde comparte experiencias propias y conocimientos sobre temas variados como sueños lúcidos, arte, magia, brujería, organización y también cuenta en tiempo real el avance de sus proyectos multidisciplinares.

Pero queremos hablar sobre todo de su faceta de escritora, que como leeréis no está desconectada del resto de disciplinas, pero es más que reseñable. Sére ha escrito en la revista Accesos de la Universidad Complutense de Madrid sobre La Descolonización de la Magia con otros autores, forma parte de la autoría en el libro ‘MÁGICAS: Brujas, Magas y Sacerdotisas del Amor’ publicado con la editorial La Felguera y de la antología ‘Atlas Negro’ de la editorial Orciny Press. Sin embargo, es en su libro ‘Hildegard Von Bingen; Las estrellas extinguidas’ (Aurora Dorada Ediciones), del que habla de otra polifacética mujer, mística y visionaria medieval. En #VEINDIGITAL hablamos con ella.

En el libro ‘Hildegard Von Bingen; Las estrellas extinguidas’ escribes que llegas hasta Hildegard a través de un momento único, como una chispa o lo que otros llaman inspiración divina. ¿Cómo llegas a dar con esta visionaria del siglo XII?

Fue un momento muy emocionante y lo atesoro en mi memoria con mucho cariño. Gran parte de mi actividad artística se centra en la performance desde la perspectiva ritual, mística y mágica. Hace unos años estaba con mi amiga Eva Espeita preparando una actuación conjunta basada en el Tarot Thoth de Aleister Crowley y Frieda Harris, con una mezcla de músicas de tradición internacional. En un punto del ensayo, comenzó a cantar algunos temas que barajábamos para el repertorio y mi mente voló a una canción que tenía interiorizada pero olvidada, de cuanto yo cantaba en el coro del colegio: “O euchari in leta via”. ¿La autora de esta canción? Hildegard von Bingen. Este reencuentro con Hildegard propició que me sumergiera de lleno en su vida y obra.

En la novela se pueden encontrar múltiples paralelismos entre la vida de Hildegard y las experiencias que tienes en la tuya. Muchas místicas caen en la enfermedad, pero en tu caso dices que en este momento de tu vida te encuentras en un naufragio personal. Tanto Hildegard como tú sois completamente conscientes en vuestras conexiones con otros mundos, no sé si nos puedes comentar un poco más sobre esto.

Mi naufragio personal se debía sobre todo a la dificultad para compaginar mi vida mundana con la mágica, por usar un término sencillo. Ahora, con todo lo aprendido, no es que las compagine, sino que forman un todo indivisible y se complementan. Años después, siento que ha merecido la pena todo este proceso. Además, considero que tengo que aportar todo lo posible para ayudar a otras personas que estén pasando por la misma situación a la que me enfrenté yo en su día.

Es notorio que antes de ponerte a escribir esta autobiografía has tenido un proceso de documentación bastante intenso. En la búsqueda de información sobre esta polifacética mujer, podría decirse que sigues muchos de sus pasos ¿también es un proceso de sanación y comprensión de una misma?

Si algo me ha quedado claro al documentarme sobre la vida de Hildegard es que el autoconocimiento es indispensable. No negarnos, no escondernos, no aislarnos. Ella contaba con aliados entrañables como su tía Jutta, el monje Volmar o Richardis von Stade. Puedes seguir siendo una persona independiente y autosuficiente, pero contar con una comunidad en la que fluyan la compresión y el apoyo mutuo es muy recomendable.

¿Cómo es ser una bruja del caos y compaginarlo con un trabajo tan racional como el tuyo? ¿Cómo es vivir esta dualidad?

Esta pregunta solo puede contestarse escribiendo otro libro o simplificando con una frase: experiencia, documentación, comprensión, aceptación, intuición.

Documentas y trabajas también el mundo onírico. Llevas un diario de sueños y de hecho es gracioso porque en el libro comentas un “ya lo escribiré después” que marca mucho los problemas de la gestión del tiempo actual en contraposición de un convento del siglo XII. Lo onírico tiene relación con la experiencia visionaria ¿crees que es otra faceta de lo mágico que compartes con Hildegard? Además, también compartes la faceta artística como la escritura o el canto. 

El mundo onírico está al alcance de todo el mundo, pero también es una puerta a la experiencia visionaria. Ahora mismo estoy inmersa en un proyecto dedicado al mundo de los sueños: Onironautas Podcast. Este podcast, creado junto a Alberto Martínez (Noviembre Nocturno) está muy relacionado con los problemas actuales que comentas, porque el ritmo de vida dificulta la introspección y la conexión, pero siempre podemos avanzar trabajando la vía onírica. Lo que hacemos en la vigilia tiene impacto en el sueño y viceversa. Sobre la faceta artística siempre cito a Alan Moore, que se declaró mago con cuarenta años y en su libro “Ángeles Fósiles”, publicado por la Editorial Felguera, afirma: “[la ciencia] deja sabiamente la exploración del interior humano a una herramienta sofisticada y desarrollada específicamente para ese uso, a saber: el arte. Si la magia se considerara un arte tendría un acceso culturalmente válido al infrapaisaje, a esos territorios inmateriales e interminables que la ciencia pasa por alto dado que no los puede ver, que son inaccesibles para la razón científica y que por ello constituyen el terreno más natural de la magia”. 

Durante siglos se ha perseguido a las llamadas brujas, después esto se sustituyó por la locura. Muchas mujeres han sufrido duras consecuencias, por eso podría considerarse que tu escritura es valiente. No sé si en algún momento del proceso de escritura has pensado en autocensurarte o no contar alguna experiencia.

De forma constante y, de hecho, ha ocurrido… pero no por miedo, sino por petición de la gente involucrada. Soy muy respetuosa con los procesos ajenos y si alguien me pide que no cuente algo, debo ceñirme a esa decisión.

¿Cuál es la mejor experiencia o anécdota que te llevas tras la puesta en librerías de tu libro ‘Hildegard Von Bingen: Las estrellas extinguidas’?

Hay incontables. También muchas serendipias preciosas. Quizás me quedo con la cantidad de gente que me escribe para contar la paz que les trae el libro y lo que agradecen haber conocido la figura de Hildegard.

Es posible que muchas de tus lectoras y lectores se hayan podido ver representados en alguna de tus vivencias y es posible que compartan procesos similares de asimilación, ¿qué te gustaría decirles? ¿Con qué enseñanza te quedas tú sobre Hildegard?

De todas las conclusiones a las que he llegado a través de distintos procesos, estoy convencida de que teniendo claro “el qué”, encontramos “el cómo”. Lo difícil es encontrar nuestro verdadero objetivo entre tanto ruido.

¿Qué opinas de la brujería mainstream?  Estos últimos años ha despertado un gran interés el horóscopo, el tarot, la brujería e incluso las místicas, ¿crees que ya no existen tantos prejuicios?

Los prejuicios siguen existiendo, lo que ha ido mejorando es el respeto a las prácticas y formas de vivir distintas a las tradicionales. Aun así, queda mucho camino por recorrer en ese sentido. 

La Sibila del Rin -Hildegard- realiza varias peregrinaciones por el Rin mientras escribe sus visiones. Sin embargo, tu peregrinación es hacia Glastonbury ¿Qué tiene esa ciudad? ¿Cómo es ese viaje para ti? No sé si nos puedes contestar sin desvelar partes clave del libro.

Glastonbury tiene algo que solo puedes descubrir pasando un tiempo allí, viendo más allá de la vorágine New Age y abriéndote de forma incondicional a la experiencia. Según una de sus habitantes más respetadas: “Glastonbury es el sitio a donde la gente viene buscando respuestas. Si decides instalarte aquí, el primer invierno que pases en este territorio te cobrará su precio”.

Sacas un nuevo libro después de 3 ediciones y seguir despertando fascinación por Hildegard, ¿nos contarás más historias sobre místicas?

En estos momentos mi libro ‘Hildegard von Bingen. Las estrellas extinguidas’ va camino de su quinta edición y no puedo estar más agradecida. Por afinidad personal y vivencial, las místicas formarán siempre parte de mi narrativa, aunque sea de manera tangencial, así que podréis encontrarlas en las páginas de mis siguientes libros…