ALBA GALOCHA: Tirando del hilo (para llegar al corazón)

18 / 10 / 2023

Alba Galocha fue la chica de portada en nuestro número 02. Era 2014, vivía en París, desfilaba para grandes marcas y su futuro estaba en construcción: “Me apetece mucho hacer interpretación, escribir y sacar fotos pero también me gustaría tener una tienda de libros, una cafetería o algo así… Hace 10 años nunca habría dicho que mi vida iba a ser como es, así que nunca se sabe, no me voy a cerrar ninguna puerta”, nos contaba entonces. Haciendo retrospectiva Alba considera que sigue siendo la misma pero “ahora tengo un poco más claro qué es lo que quiero y más confianza en mí misma”.

 

 

La interpretación no tardó en llegar, con sus primeros papeles en películas y luego también en series de televisión. El confinamiento impulsó su talento creativo y en diciembre de 2020 presentó su primera muestra “Moito miras tu”,  un ejercicio autobiográfico a través del dibujo y el bordado. En 2022 nos sorprendía con el proyecto de colaboración artística junto al fotógrafo Pablo Curto que cristalizó en el libro “Hay un volcán encima de casa” publicado por Terranova. Y en mayo de 2023 llegaba su primera exposición en solitario con “El cuerpo sabe, la cabeza resiste”, una colección de piezas que según la artista, son, de alguna manera, retratos de su cuerpo.

Este otoño Alba Galocha es arte y parte de la nueva campaña “Por amor al arte” de la firma de moda sostenible Thinking Mu disparada por Christian Colomer en Vasto Gallery. Además de ser imagen de la nueva colección otoño-invierno, también ha creado una camiseta de edición limitada de tan sólo 50 unidades inspirada en la obra del pintor Edwar Krasinski en la que Alba trabaja con un hilo, uno de los elementos centrales en su obra artística. Aprovechamos el lanzamiento de esta colaboración para charlar con ella.

 

 

Poco a poco has ido abriendo el repertorio de tu trabajo como creativa: empezaste como modelo, luego llegó la interpretación y desde hace un par de años estás inmersa en la producción artística. ¿Cómo convives con esta diversidad de disciplinas?¿Qué te aporta cada una de ellas?

Creo en la evolución como camino, en el aprendizaje, en seguir la intuición y en el trabajo. Con el tiempo he ido aprendiendo (creo que nunca dejo de aprender, siempre estoy alerta con esto) y, de alguna manera, siento que una cosa me ha ido llevando a la otra. Estudiar diseño de moda me llevó a trabajar como modelo, el ser modelo a formarme como actriz y esta formación abrió un canal y una necesidad de expresión que, en mi caso, encontró salida en el arte, con el que vuelvo al principio que es la tela, es el hilo y son las costuras. La verdad es que no me canso, bueno sí haha, pero no me aburro y los días son largos porque hago mil cosas cada uno de ellos. Es una suerte la verdad poder estar haciendo todo lo que hago y tener la libertad de, más o menos, poder decidir.

 

En una entrevista comentabas que empiezas a sentir que has encontrado tu camino. ¿Qué es lo que más te llena en este momento?

Sentirme bien y orgullosa de mí misma, estar tranquila y confiar en lo que hago y las decisiones que tomó. Siento que es importantísimo cuidarse, he dejado de beber alcohol de forma social y sistemática, y creo que es de las cosas que más me ha cambiado a nivel espiritual. También le he perdido el miedo a ir en bici y así voy todas las mañanas a clase, primero cruzó un parque y luego Madrid Río hasta Príncipe Pío, la verdad que me da una energía buenísima, es una hora en la que pienso de forma casi meditativa y tener una rutina horaria estricta me está ayudando con respecto a mi tranquilidad.

En tu última campaña para Thinking Mu ya no posas como modelo sino como artista. De hecho, has creado una camiseta de edición limitada con motivo del lanzamiento de la colección “Por amor al arte”. ¿Nos podrías contar cómo surgió la colaboración y en qué se inspira la propuesta?

La colaboración fue una propuesta de la marca una vez ya habíamos acordado que iba a ser la imagen de campaña. Y la camiseta está inspirada en algo que leí sobre Edward Krasiński y es que en su estudio/apartamento tenía una línea azul que marcaba toda la pared, armarios, puertas…a 1.30m que es la altura media a la que se encuentra el corazón, su explicación fue que es la altura a la que se encuentra nuestra percepción y que nuestro aprendizaje debería ser desde nuestro corazón en lugar de nuestra cabeza. Me pareció que tenía bastante que ver con el concepto alrededor del cual trabajé en mi última exposición “El cuerpo sabe, la cabeza se resiste

Una vez me hicieron la propuesta de hacer una camiseta tenía claro que quería utilizar esta idea y hacer algo con el corazón. Entonces se me ocurrió coserlo de atrás hacia adelante, o viceversa, y hacer imaginar que ese hilo nos atraviesa. También me gusta esta idea de llevar hilos colgando en la ropa, yo suelo llevar por mi trabajo, y ver cómo la gente siempre quiere quitártelo, tirar de él, el hecho de que en este caso no se deba también me gusta como juego.

 

 

¿Qué simbolismo tienen los hilos en tu trabajo?

Nunca me había parado a pensar tan directamente por qué el hilo. Es un material muy familiar para mí, o así lo siento. Me gusta fino, como cosiéndolo puedes sostenerlo, pero en cuanto lo dejas libre está de alguna manera vivo. Es limpio, sutil y silencioso, el silencio me parece importantísimo. Creo que la sutileza que inspira es importantísima. Seguiré pensando en esto…aunque realmente creo que no tiene mucha más vuelta que el hecho de que intuitivamente me siento muy cercana al hilo, no todo necesita tener una explicación racional J

 

Con el diseño de esta camiseta te apetecía también hablar de la importancia de la conexión cuerpo-mente y de la necesidad de priorizar el bienestar y equilibrio individual…en un mundo tan sobre-estimulado resulta casi una utopía. ¿Cómo podemos cultivar esa conexión? Tú, ¿cómo lo consigues?

El dejar de beber, y fumar, son de las cosas que más me han hecho pensar en cómo funcionamos como sociedad, en lo cansades y distraídes que estamos. La velocidad, el sobre estímulo, la estética, el molar…me parece agotador, la verdad, y yo abogo por algo mucho más sencillo, simple y silencioso. Parece difícil salirse de la ecuación a veces, y más dedicándose a algo como la moda, pero creo que la esencia de una misma termina por sobresalir con respecto al ruido, y cuanto más espacio se le dé a ese pequeño impulso de vida, mejor. El miedo a quedarse sola, perder según qué amistades, no estar en la pomada… todo eso es pasajero y, al final, salir de ahí merece muchíiiiisimo la pena. Os animo a todas a quedaros en casa leyendo, o yendo a pasear o a hablar al parque con un amigue de verdad más a menudo.

 

 

Thinking Mu es una firma con un gran compromiso medioambiental y social. Desde tu punto de vista ¿crees que a nivel individual podemos contribuir al cambio? Cuando compras prendas, ¿hasta que punto es importante para ti los valores de las marcas? 

Mm, con las compras voy por épocas y por momentos, me gustaría comprar menos de lo que lo hago pero creo que tampoco compro mucho. Compro cosas que necesito, como buenos básicos de vez en cuando, e igual un caprichito, como unas zapatillas cómodas de una colaboración que me interesa, o algo de alguna diseñadora que me guste especialmente. Pero sí, claro, el consumismo es malísimo para une misme y para el planeta, y tú sola no vas a salvar el mundo pero sí que puedes salvarte a ti :p

 

A nivel personal y profesional, ¿qué es lo que más te motiva en este momento y por qué? ¿Qué te inspira y qué te alimenta?

Sentir que el trabajo que he ido desarrollando hasta ahora da sus frutos. La base del aprendizaje está, por lo que ahora, es más una cuestión de hacer y hacer, para ver a dónde me llevan los procesos, que de pensar y cavilar y dudar. Estoy muy contenta con mi trabajo, muy orgullosa y con muchas ideas y ganas de seguir haciendo.

 

 

¿Podrías explicarnos un poco cómo funciona tu proceso creativo?

Realmente depende del proyecto, he tenido distintas formas de desarrollar. Algo en común entre ellas es que siempre es personal, suele empezar por una inquietud, algo que se mueve dentro, y a partir de ahí empiezo a investigar, ya sea haciendo, o escribiendo, o manteniendo conversaciones acerca del tema con amigues, esto último me está llevando a sitios valiosísimos últimamente. Es verdad que con mi última exposición “El cuerpo sabe, la cabeza se resiste”, llegué a puntos de investigación muy interesantes y ahora sigo trabajando sobre conceptos y técnicas que surgieron entonces. Es emocionante ver cómo la cosa sigue creciendo.

 

Si pudieras escoger tres artistas con los que te irías a cenar, ¿quiénes serían y por qué?

Ana Jotta y Esther Ferrer, son el tipo de persona que me interesa, con una carrera valiosísima y en un momento, que entiendo, fue difícil para las mujeres en el arte. Ambas tienen un carácter que me inspira muchísimo respeto, escucho sus entrevistas, veo o leo acerca de su trabajo y eso es lo que me inspira, el camino artístico con el que sueño si me vengo arriba. Son las personas de las que quiero aprender.

Y sólo te voy a decir dos, porque pienso que cuando hay más de tres personas en una cena o reunión, se crea una jerarquía y siempre hay alguien que habla menos. Yo en general prefiero una de cena de 3 que de 4 o 5 personas.

 

Y si por arte de magia pudieras tener la obra que quisieras en tu casa, ¿cuál elegirías y por qué?

Pues mira, ahora mismo estoy enamorada de “El mar, aún más cerca” de Maria Tinaut, y pensándolo ahora, creo que a ella la invitaría a esa cena con Ana Jotta y Esther Ferrer, de hecho, me gustaría mucho que viniera. Sería una cena preciosa <3

 

@maria.tinaut

La obra me parece que refleja de una manera muy sutil e inteligente algo sobre lo que he pensado mucho y que me atrae: la tensión. Esa sensación de que la posibilidad está pero que a lo mejor no, que no se puede. Llega hasta a marearme un poco pensar en ello, es precioso y nostálgico. Y ahora pienso, ¿puede que lo que representa tenga que ver con la forma de ser de una persona gallega? No sé, igual por ahí si que ya me estoy yendo por las ramas… Es una pieza que me encanta y la siento muy cercana a mis inquietudes.

¿Dónde te gustaría verte dentro de cinco años?

En la casa en la que nació mi abuela. Llegar a eso sería cerrar un círculo precioso. Ojalá pueda tomarme un café con mi abuela en esa cocina. Veremos de aquí a cinco años.