Referencias a la cultura «Kawaii» y gran experimentación de volúmenes. Así son las prendas cómodas, elegantes y minimalistas de The Stoat.
¿Quién hay detrás de The Stoat?
Somos Carlos Paredes, nacido en España y yo, Renato Ruffoni, nacido en Venezuela. Somos hijos de empresarios españoles e italianos respectivamente, y siempre hemos estado ligados al mundo empresarial, con predilección por carreras creativas. Nos conocimos en Madrid en 2011, y decidimos prepararnos para formar nuestra empresa de moda. Yo soy sastre y modisto y me especialicé en Fashion Management, Publicidad y Diseño Gráfico, y Carlos es sastre y diseñador de moda, especializado en cine de animación. En 2015 decidimos aventurarnos y realizar diseños y colecciones para nuestra marca, The Stoat, que significa “El Armiño”. Su estética está basada en las técnicas clásicas europeas y asiáticas, derivada de su pasión por la estética oriental. Es por esto que podremos encontrar restos de la cultura “Kawaii” japonesa en su imagen de marca y accesorios. Además, se ve reflejada en la experimentación con volúmenes y cortes, con una proporción y comodidad para una vida en movimiento constante.
¿Cómo surgió la idea de crear vuestra marca?
Comenzamos The Stoat como parte de una nueva filosofía, con la intención de devolver parte a las raíces clásicas de costura y sastrería, y agregando elementos de confort presentes en la ropa del día a día, los cuales son muy importantes para nosotros ya que con ellos buscamos hacer piezas únicas, adaptadas a las necesidades del hombre y la mujer contemporáneos. La atención por el detalle se refleja en la fabricación y en la experimentación con el volumen, los colores y los elementos, que se suman a la experiencia de llevar The Stoat.
¿Cómo definís el estilo de la firma?
El confort, la exclusividad y los elementos gráficos divertidos son las principales características de nuestro taller. La combinación de técnicas clásicas con conceptos modernos hace que nuestra ropa tenga un diseño único y muy cómoda. Todas nuestras colecciones se crean en su totalidad en el taller, controlando cada paso del proceso de fabricación y asegurándonos de que cada pieza está en perfecto estado. Nuestro Atelier ofrece uno de los servicios más exclusivos de la industria de la moda, con alta costura y sastrería a medida y con la integración del cliente en el proceso de fabricación de la prenda. Teniendo en cuenta que vivimos todos los días en nuestra ropa, también ofrecemos una pequeña línea de conceptos básicos de alta calidad para complementar las piezas más importantes de la colección.
¿Qué piezas componen la nueva colección SS17?
La sensación de ligereza y de verano encarnan nuestra nueva colección primavera/verano 2017, que presentamos el pasado 14 de septiembre. Está hecha con telas de seda ligeras, que complementan el patronaje dándole modernidad y singularidad. Todo esto se presenta contra una paleta neutra de blancos y beige, complementados con estallidos de colores pastel que van del azul al verde y al rosa. La colección femenina, con telas de seda, fluye con perfecta armonía con el movimiento del cuerpo, sin tapar la belleza natural de la persona que lo lleva. Faldas y shorts de algodón, vestidos, camisas y pantalones de seda son algunas piezas que componen de mujer. Por otra parte, la colección masculina tiene técnicas más estructuradas y un patronaje recto, que van desde pantalones de lino, rústicos y clásicos, hasta camisas de algodón Oxford y un traje de punto de algodón, cómodos no en la forma y en el tacto. Las piezas tienen un ajuste clásico y son originales y ponibles. En The Stoat, logramos crear colecciones únicas y perfectamente adaptables, que hacen una declaración fuerte y complementan la modernidad clásica de su consumidor, sin duda una “Colección de Estilo.”
¿De dónde salió la inspiración para crearla?
En las fiestas de pijamas de los Estados Unidos en la época de los 50, mezclado con el concepto de «el sueño americano», atando así el lujo y el confort. James Adams Truslow define el sueño americano como: «La vida debe ser mejor y más rica y plena para todos, con la oportunidad para cada uno de acuerdo a la habilidad o el logro». Con este concepto hemos presentado una campaña que muestra una línea más lujosa de ropa, que contrasta con el fondo de la naturaleza virgen sin pretensiones, y con los modelos mostrando una actitud chic pero de manera natural.
¿Destacáis alguna pieza en especial de la nueva colección?
Nos encanta el vestido corto de una sola pieza. Ha sido la prenda más complicada de conceptualizar, de hacer el patronaje y confeccionar. Resultó un reto ya que significaba llevar el patronaje a la mínima expresión y tratar de no introducir prácticamente ninguna costura ni pinza, pero que, sin embargo, quedó muy favorecedor. Nuestras prendas son un juego de colores y volúmenes.
¿De qué otras formas experimentáis?
La ropa tiene elementos sobre los tejidos «Kawaii» en algunas de las piezas y accesorios. Solemos experimentar con tejidos que rompan con la utilidad habitual que se les da, mezclando tejidos muy costosos y serios con prendas mas casuales, para así darles un rango más amplio. También realizamos experimentos a la inversa: usamos tejidos del día a día con prendas más serias y clásicas, y les damos un aire juvenil y ponible. Todo esto ayuda a romper con la severidad de los elementos de corte clásico, que a su vez, presentan funcionalidad y un ajuste perfectamente cómodo, ayudando a revelar la estructura de las piezas sin sacrificar los detalles.
¿Quienes son vuestros referentes estéticos?
Como referente estético de la moda clásica tenemos a Cristobal Balenciaga, tanto por su estilo que con el paso de los años apostó por el minimalismo, como por sus background en sastrería clásica, ya que de ahí viene su técnica de diseño y patronaje experto. Christian Dior, por la manera de entender el cuerpo de la mujer y por su visión de saber lo que se requería en el momento en el que empezó a crear ropa. Otro referente estético de Disney, ya que ha sido parte importante de nuestra vida y de nuestra etapa de crecimiento, tanto en valores morales como en cuestión de colores y estética. Y por último también nos inspiramos mucho en la cultura asiática, específicamente la japonesa y la coreana: de los japoneses tomamos la manera respetuosa y dedicada de ver la vida, de manejar las relaciones. Nos encanta el anime y la creatividad que tienen al vestir a los personajes y a la hora de crear looks diferentes, que le dan personalidades muy bien definidas y representadas.
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