«Detrás de la puerta, invisible, otra puerta» da título a esta muestra que refleja el universo personal de una de las máximas representantes del segundo surrealismo.
Voltage, 1942
El Museo Reina Sofía acoge hasta el 7 de enero la exposición «Detrás de la puerta, invisible, otra puerta», la primera retrospectiva dedicada a la obra de Dorothea Tanning (1910-2012), una de las artistas más relevantes del siglo XX. Organizada conjuntamente con The Destina Foundation y la Fundación Museo Reina Sofía, la muestra agrupa 150 obras que la artista estadounidense creó entre 1930 y 1997.
Éperdument, 1962
A lo largo de su carrera, Tanning estuvo en contacto con diversas disciplinas artísticas como la pintura, la escultura «suave», los poemas o el diseño de vestuario y decorado para ballets. En sus creaciones, reflejaba su universo personal, a través del que daba sentido a la vida moderna. El resultado era un mundo surreal que rompía con el espacio entre la obra y el espectador, lo que le convirtió en una de las representantes de lo que se conoce como segundo surrealismo.
Family Portrait, 1954
Fue una artista muy polifacética y adelantada a su tiempo, ya que en sus obras trató temas tan controvertidos como la sexualidad en la tercera edad y la identidad de género, incluso utilizó su arte como un medio de crítica a la estructura familiar patriarcal que imperaba en aquel momento.
The Philosophers, 1952
Para Dorothea Tanning, el arte tenía un poder que le permitía crear espacios, sensaciones e ideas más allá de lo real, por eso el Museo Reina Sofía ha roto con su modelo expositivo habitual. Esta exhibición se organiza en 8 salas temáticas sucesivas que muestran las diferentes etapas de su trayectoria artística. La puerta abierta, Destinia, Entre vidas, Retratos de familia, Tango Lives, Esculturas vivientes, Hôtel du Pavot, Chambre 202 y Murmuros dionisíacos, son las habitaciones que acogen las obras de Tanning, muchas de ellas nunca antes vistas por el público.
Moeurs Espagnoles, 1943
Eine Kleine Nachtmusik, 1943
En «Detrás de la puerta, invisible, otra puerta», los espectadores pueden disfrutar de piezas procedentes de colecciones privadas y de instituciones como la Tate Modern de Londres, el Museo de Arte de Filadelfia o el Centro Pompidou de París. Puerta tras puerta, la muestra incita al público a formar parte del mundo de la artista, repleto de fantasía y revelaciones ocultas.
–