Un paso en falso, o más bien en acierto y te adentras en el backstage de Outsiders Division. Es como abrir un baúl de juguetes antiguos, de esos que miras y te entra la añoranza y morriña. Esos juguetes en cuatricomía rojo, verde, azul y amarillo cual parchís, de todos los tamaños, texturas y volúmenes. Es como abrir un cofre del tesoro con mil opciones y no saber cuál elegir, porque cada una tiene su detalle diferenciador y divertido. Las prendas, al igual que esas cajas de sorpresas, estaban tan comprimidas las unas con las otras que era difícil saber a cuál mirar. Por el suelo, más de lo mismo, zapatos voluminosos de peluche, otros eran botas de lluvia con agujeros, y otros adoptaban formas tan disparatadas que ni se podían asociar como calzado. Las etiquetas de las prendas, cual cuadros: un caniche precioso sujetando una rosa roja y las letras de Outsiders Division nítidas en el centro.
Entre unos bultos y otros se podía adivinar un bolso, el detalle de un botón que era un osito con lazo. Sobre la mesa, una tira de zanahorias (tan frescas que conservaban unas hojas bien verdes) esperaba a ser colocada en el pecho de una modelo a modo de top.
Sombreros de castillo, de helado, de osito o de orejitas a lo Mickey coronaban los treinta y cinco looks de esta colección llamada Extraordinario. Prendas de croché, tul, patchwork y bordados. En todos los diseños apreciamos cómo los elementos tiernos y creepy coexisten en un mismo conjunto o estructura, como conviven las dos caras de una misma moneda.
David, la cabeza creativa de la firma puede presumir ya de dos premios Mercedes-Benz Fashion Talent. El gallego creó la marca en 2012 vendiendo solamente sombreros y accesorios, hasta que en 2016 debutó con looks completos en la MBFWMadrid. Siempre se ha sentido un outsider y nosotros agradecemos que comparta esa perspectiva del mundo que tiene tan fuera de lo común.
La diversión y la felicidad de expanden más rápido y es así como la antesala del desfile en 080 Barcelona Fashion se extendió al pasillo entre los backstage y el line-up de la pasarela. Sacaron a un modelo que llevaba un look de gusano infinito que debían arremolinar dos miembros del equipo alrededor del cuerpo del joven. Ipso facto, un tumulto de audiencia rodeó la escena con sus cámaras o móviles para documentar el momento outsider que sacó a todos una sonrisa. Ahí no acabó el espectáculo ya que, miembros de la organización de Esma fueron persuadidos para llevar trajes de muñecos inflables y sentarse cada uno en una grada de la audiencia. Los muñecos hinchables también tenían protagonismo en medio de la pasarela, donde había varios de considerable tamaño bailoteando al son de la música y las luces.
Vivir el backstage de Outsiders Division es descubrir un cuento nuevo, con sus piratas conquistando castillos, sus neumáticos, flores, monstruitos y peluchitos. Cuentos para abuelitos, adultitos y niñitos, porque todos sentimos atracción por las historias con un bonito mensaje y mejores personajes.
Fotografías de Ionela Bona para VEIN DIGITAL
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