¿Qué hay de nuevo? Imaginar nuevas formas de vestir

08 / 07 / 2024

¿Qué hay de nuevo? La columna de Estel Vilaseca para VEIN.es

Cuando parece que todo es más de lo mismo, aparecen ideas luminosas como “Enclothe”, el último lanzamiento de Satoshi Kondo para Issey Miyake. Se trata de una colección de prendas multifuncionales y multitalla que apelan a la imaginación del usuario. A través de una interesante campaña en redes, en la que la prenda aparece colgada en una pared como si se tratara de una obra de arte, lanzan la pregunta: “¿Cómo te lo imaginas?”. La modelo toma la prenda y experimenta con ella. Al acabar, otra pregunta: “¿Cómo la harías tuya?”. El director creativo, al frente de la firma desde 2019, hace suyas las palabras de Miyake “diseñar es un acto de descubierta” y, al igual que su mentor, parte de una pieza rectangular de tejido para concebir esta interesante colección de prendas. Lo que inspira a Kondo en su camino en el mundo de la moda es “la ilusión que se puede hallar en el ritual de vestirse a diario, de encontrar un conjunto que te pueda hacer feliz durante todo el día – eso es lo que me inspira”, explicaba en 2019 con motivo de su debut a Liam Freeman de Vogue.

 

 

Aunque la modularidad y la multifunción son ideas principales en las metodologías y estrategias de diseño sostenible, no está siendo fácil su adopción en la calle más allá de algunas excepciones. Durante las últimas temporadas se han podido ver en pasarela marcas que han experimentado con estas nociones, ya sea en prendas que, a través de cremalleras o botones, permiten transformarlas o bien unirlas a otras piezas. Sandra Garratt, diseñadora de Multiples y Singles, fue pionera en la introducción en el mercado de prendas modulares. Empezó su proyecto a partir de la colección de graduación que presentó en 1974 en el Fashion Institute of Design and Merchandising en los Angeles: “Las necesidades mundanas de las personas son las que la mente diseñadora debe abordar (…)” declaraba en 1988 en una entrevista en The New York Times. Sus diseños se articulaban alrededor del concepto MODBOX que eliminaba ya en la época la idea de tener armarios separados para el trabajo, el ocio y la noche: “Las piezas se pueden mezclar, combinar, superponer, modificar, enrollar y accesorizar en incontables combinaciones y proporciones…desde las opciones más conservadoras a las más atrevidas. MODBOX es como una hoja de papel en blanco para que rellenes según tu deseo”.

 

 

Una versión actual del concepto de Garrett podría ser el proyecto LR3 de Luis Rubi y Daniel Corrales. Al igual que sus prendas, las de LR3 no entienden de géneros ni de tallas y se presentan listas para que cada persona las ajuste y adapte según sus gustos y necesidades personales. Detrás de este proyecto, además, hay también una intención política de acabar con los limitantes arquetipos de belleza estándares. “Algo mágico ocurre cuando las personas se prueban nuestras prendas. No importan sus proporciones corporales, su género, su edad o su cultura…las emociones llenan la habitación, sonríen, bailan,  giran y juegan con las prendas que llevan. Se olvidan de lo que creen que el estilo debería ser. Dejan atrás todas las reglas preconcebidas sobre lo que les sienta o no les sienta bien”. La firma Camper, lleva años buscando otras maneras de diseñar y de producir. Su modelo Junction, que lanzó en 2022, es un zapato circular dos en uno. A demás de que permite un desensamblaje sin residuos apto para su posterior reciclaje, presenta un divertido sistema de punteras extraíbles. Al zapato de piel se le pueden unir punteras de diferentes colores permitiendo actualizar el estilo del calzado sin tener que comprar uno nuevo.

 

 

Gospel Studios, el proyecto colaborativo de moda impulsado por el futbolista Héctor Bellerín y el emprendedor Horacio Glez-Alemán, junto a los diseñadores Isra Frutos y Quim Barriach – antiguos Cardona Bonache y actualmente India Juliette – , incluye también prendas que se transforman y que cuestionan el status quo. Con su “adaptable sistema”, el usuario puede configurar el volumen y jugar con las siluetas a su gusto: “Todo el mundo tiene un cuerpo diferente y está bien poder hacer esta prenda tuya”, explican en la web. Este proyecto tan meditado que es Gospel Studios – sus fundadores llevan más de dos años dándole forma

– interpela el sistema de la moda actual a través de varias acciones de hackeo. Cuando la pieza llega en manos del usuario no está lista para vestir, sino que necesita de una manipulación para que podamos empezar a interactuar con ella.

 

@gospelestudios

Así, pasando del ready-to-wear, en Gospel se definen como “not-ready-to-wear” con el fin de subvertir la forma en la que la ropa se consume actualmente: “A partir de un enfoque crítico, queremos fomentar la curiosidad en el usuario, promover el espíritu lúdico a través de varios sistemas de diseño y fomentar un ritmo más lento, no sólo disminuyendo la velocidad sino invirtiendo más tiempo para descubrir e interactuar con nuestra ropa”. Aunque hay veces que cuesta vislumbrar un futuro para la moda que sea más esperanzador y ético, otras emociona ver que en realidad estamos solo al inicio de algo que puede ser mucho mejor. Sólo queda agradecer a los valientes que, ante el panorama actual, no cesan en su intento de hacer las cosas de otra manera.