Puzzle: el arte de la reconstrucción

27 / 09 / 2021
POR África Poveda

Hablamos con Cristina Ruiz, la diseñadora que cerró la pasarela EGO con una colección envuelta por la sastrería, la sostenibilidad y el carácter.

‘Puzzle’ es la marca de identidad de Cristina Ruiz. Desde pequeña ha tenido una estrecha relación con la moda, algo que le permitió desarrollar una actitud fuerte, firme y ambiciosa a la hora de diseñar. Ahora, esta potencia y valores se convierten en los pilares fundamentales de su nueva firma. Su talento creativo le ha llevado a presentar su primera colección ‘PV001’ en la ‘Mercedes-Benz Fashion Week’ de este año como una oportunidad de mostrar el carácter propio.

Gracias a su gran pasión por la sastrería, Cristina logra mezclar la calidad y la sostenibilidad bajo lo que ella considera las tres bases del diseño: transmitir distintas y fuertes emociones por medio de la luz y del color, construir y deconstruir como fuente de innovación, y reflejar las experiencias personales que marcan el sentido de la vida. Como resultado, una colección que, utilizando técnicas zero waste, consigue restablecer las bases de lo tradicional para diseñar una propuesta más atrevida, diferente y respetuosa con el medio ambiente. 

En esta ocasión, tras haber sido una de las candidatas al premio ‘Mercedes-Benz Fashion Talent’, la diseñadora ha demostrado que ‘Puzzle’ es el claro ejemplo de se puede diseñar algo más que una simple colección que brille a la hora de desfilar: lo importante es reflejar la personalidad y el carácter personal que permita transmitir una identidad única y emocionante. En esta entrevista, Cristina nos cuenta todos los entresijos de su nueva colección, sus grandes influencias a la hora de crear y la gran experiencia que se lleva de participar en la pasarela EGO. 

Llevas la moda y la ambición en la sangre desde que eras una niña. Ahora, gracias a tu firma, puedes mostrar esa actitud a la hora de crear. ¿Quién es Cristina Ruiz y cómo nació ‘Puzzle’?

Soy una diseñadora emergente recién graduada del IED con muchísima ilusión, energía y pasión por lo que hago. ‘Puzzle’ nació a raíz del problema de la contaminación, sobre todo en la industria del diseño. En los últimos años nos hemos (por fin) dado cuenta de que los recursos en el mundo son limitados y que tenemos que cuidar la Tierra para poder seguir viviendo en ella.

A raíz de ese problema, intenté encontrar una solución para una de las causas principales de contaminación a la que nos enfrentamos: la perdida de tejido a la hora de construir piezas. Después de un tiempo probando diversas opciones y diseños, logré una técnica de Zero Waste con la que mis diseños siguen siendo elegantes, versátiles y, sobretodo, menos contaminantes.

Si hay una prenda que define a la perfección tu diseño, sería sin duda el traje. Y es que ‘Puzzle’ no sería la misma firma sin estar altamente influenciada por la sastrería. ¿Cuál es tu secreto para lograr esa identidad tan única?

Como cuento en las bases de mi diseño, las experiencias que vivimos en nuestras vidas son las que nos hacen ser quienes somos. Desde muy pequeña las prendas que me aportaban tanto comodidad como elegancia eran la americana y las faldas de uniforme, así como los famosos castellanos; piezas que siempre serán parte de mi día a día.

Cuando empecé con ‘Puzzle’, quise ser muy fiel a cómo soy yo, volcando completamente mi personalidad y libertad creativa en la identidad de la marca. Realmente todos los elementos se fueron juntaron de forma natural y nada forzada. Ese ha sido mi secreto, no he forzado ningún elemento de mi marca para funcionar juntos, si no que todo ha ido encajando consigo mismo como piezas de Tetris porque ‘Puzzle’ es un reflejo al 100% de mis ideales y mis ideas.

Cristina Ruiz vistiendo a una de sus modelos con la nueva colección de ‘Puzzle’

Aterrizas en la semana de la moda de Madrid como una de los 8 candidatos al premio ‘Fashion-Benz Fashion Talent’ de este año. ¿Cómo se siente tener una oportunidad así?

Para mí ha sido todo surrealista. Competir en la EGO era un sueño que siempre he tenido desde que tengo uso de razón. Es más, hace un par de meses, hubiera sido completamente impensable. Incluso llegué tarde a la convocatoria. Decidí finalmente intentar competir gracias al apoyo que recibí, tanto de mis profesores como de mi familia al realizar mi trabajo de fin de grado en la universidad. Ellos me ayudaron a confiar más en mí misma y a descubrir que, con mucho esfuerzo, los sueños se pueden hacer realidad.

Aprovechas el momento para presentar una colección que engloba a la perfección lo que consideras las tres bases del diseño: color, capacidad de construcción y experiencias. ¿Crees que son valores que todos los diseñadores deberían introducir en sus propuestas?

Para mí, cuando un diseñador tiene total libertad creativa, debe volcar de forma completa sus experiencias y forma de ser en lo que hace para que todo tenga sentido. Si analizamos a los mejores diseñadores de la historia, precisamente su personalidad independiente, incluso de las normas sociales o de las tendencias del momento, fue lo que los convirtió en disruptivos y diferentes.

Un diseñador, desde mi punto de vista, debe entender que para innovar no tiene que intentar hacer una colección distinta por que sí, si no que, a base de entender el arte, pueda ver lo que vino antes y lo que puede venir después. Tiene que volcarse a sí mismo en sus diseños y deconstruir lo que sabe para construir novedades y avanzar con una propuesta que tenga sentido. En cuanto al color, es algo totalmente subjetivo en lo que yo me quería basar para desarrollar esta colección, ¡pero también me encanta el blanco y negro!

Por un lado, siendo una apasionada del cine y de las artes escénicas, has puesto en práctica la capacidad de poder crear distintas y fuertes emociones por medio de la luz y del color. ¿Cómo logras entrelazar ambas cosas en tus diseños?

Cuando voy al cine, lo primero que me envuelve y que consigue crear fuertes emociones en mí, son la luz y los colores que veo en pantalla. Es impresionante como solamente añadiendo o extrayendo un color o cambiando la iluminación de una secuencia se pueden conseguir objetivos tan distintos.

Mis pañuelos simbolizan precisamente eso, fuentes de luz y de color que evocan sentimientos muy distintos unos de otros, lo que los hace muy personales. Cuando planteé la pasarela de la EGO de ‘Puzzle’ siempre tuve muy en cuenta que esta colección debía ir acompañada de una dirección de arte muy luminosa y colorida. Finalmente, diseñé el degradado que se pudo apreciar en pantalla y que cambiaba totalmente el ambiente de la pasarela al tiempo que se iba desarrollando.

Además, apuestas por una confección que se basa en la construcción y deconstrucción de elementos tradicionales con el objetivo de crear algo nuevo y evolucionar, concretamente a través de la sastrería. ¿Consideras importante saber jugar con lo habitual y tradicional para conseguir una colección más atrevida y diferente?

Como he mencionado antes, bajo mi punto de vista, cuando un diseñador no tiene en cuenta los elementos tradicionales o la historia textil que lo precede a la hora de innovar, realmente está queriendo ser diferente «por que sí”. Para mí, evolucionar es transformar lo establecido para lograr algo nuevo y disruptivo, que es lo realmente complejo y bonito del diseño.

Incluso has tenido en cuenta tus experiencias personales durante todo el proceso de creación. La ocasión perfecta para reflejar tu personalidad, carácter e identidad. ¿En qué medida este proyecto está contando la historia de Cristina Ruiz? ¿Qué intentas transmitir con él?

Esta colección es un reflejo total de cómo soy yo. Lo bueno de presentarme a una competición como la EGO es que tengo libertad creativa total de ser yo misma sin tener que seguir ninguna historia establecida de marca. ‘Puzzle’ está lleno de elementos que ilustran mi personalidad: desde la influencia de mis hermanos y mi padre con los trajes, hasta la elegancia que he heredado de mi abuela y pasando por las emociones que me crean los colores y los artistas a los que admiro. He querido representar mi infancia, mi madurez y mi forma de expresarme.

Algunas de tus piezas, como los pañuelos, están pintados a mano y creados a base de una técnica de ‘zero waste’. ¿Has acudido a otros métodos o procedimientos en otras prendas que hagan de ‘Puzzle’ una firma más sostenible?

Sí. Uno los principales problemas de los tejidos de hoy en día es que muchos están compuestos por materiales distintos, orgánicos o inorgánicos, y la única forma de reciclarlos es mediante un proceso de separación química que limita muchas veces el porcentaje de reciclado final que se puede aprovechar.

A la hora de seleccionar los materiales para la sastrería de ‘Puzzle’ he dado prioridad a encontrar tejidos 100% reciclables que no requieran de ningún tipo de separación química. Los pañuelos, por supuesto, están elaborados con una seda natural con una huella ecológica nula y una pintura con base de agua también no contaminante.

El ganador del premio, a parte de conseguir un enorme reconocimiento, también recibe una beca económica para seguir creciendo en la industria. ¿Utilizarías el premio para seguir desarrollando ‘Puzzle’ o lo invertirías en otros proyectos personales?

Incluso sin haber ganado estoy muy motivada por seguir creciendo y desarrollando ‘Puzzle’ Tengo muchas ganas de continuar diseñando a mi manera y demostrar de lo que soy capaz. El año que viene me intentare presentar a la EGO otra vez, ¡a ver si hay más suerte!

Este certamen apoya a los diseñadores que están empezando en la industria y a la moda nacional. Como talento emergente, ¿cuál es la parte más positiva que te llevas de esta experiencia a tu terreno profesional?

Poder conocer a todos los diseñadores de la edición y poder hacer piña de «marca España» porque el talento español emergente es muy potente y viene para quedarse. Además, ha sido una forma impresionante de aprender cómo funcionan las cosas en la vida real, ya que acabo de graduarme y todavía no tengo mucha experiencia profesional.

Fotografía de Elisa Sanz para #VEINDIGITAL

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